
“Animales difíciles” de Rosa Montero: los peligros de una superinteligencia desconocida
Es una lectura absorbente que combina acción, conspiración y reflexión sobre el futuro de la humanidad. Rosa Montero cierra la serie de Bruna Husky, dejando al lector con una sensación de inquietud ante un futuro que no parece tan improbable, y que cada día que pasa se ve menos lejano.
“Animales difíciles” es la cuarta y última entrega de la serie de la detective Bruna Husky, escrita por la conocida autora Rosa Montero, una de las participantes en la FIL de Guadalajara 2024, que tuvo a España como país invitado. A la fecha, ella es autora de alrededor de cuarenta obras, si se contabilizan algunas de sus libros de no ficción.
Esta última novela está ambientada en un Madrid distópico del año 2111, la obra combina elementos de ciencia ficción y novela negra para presentar un thriller vertiginoso, pero a la vez reflexivo. Este tipo de combinación de géneros, es el que desde inicios de los años noventa, ha sido cultivado en Chile por el escritor Diego Muñoz Valenzuela.

La protagonista Bruna Husky, es una detective tecnohumana, más específicamente un clon, una “rep”, que ya no es la poderosa máquina de combate que fue en aventuras anteriores, sino una rep de cálculo más vulnerable. Contratada para investigar un atentado, supuestamente por parte de anarquistas, en las instalaciones de Eternal, una empresa tecnológica que promete la eternidad mental, Bruna se sumerge en un caso cada vez más intrincado. Junto al inspector Lizard, deben enfrentar el poder desatado de la Inteligencia Artificial y las fuerzas tras las sombras de un mundo donde la ambición puede desencadenar catástrofes.
A esas alturas, nuestro planeta está organizado en una sola nación, los Estados Unidos de la Tierra, que en la época en que transcurre la historia es presidida por Dong, un gobernante que por sus posturas extremas, y por su nombre, me evocó a Donald Trump. Sus seguidores son llamados “dongos”.
La novela combina la ciencia ficción clásica con un policial claramente noir: hay varios tópicos de ese género. Por ejemplo, el hecho de la detective colabore con un inspector de la policía regular, así como el involucramiento de personas poderosas en los delitos. Incluso la novela revive el mito de la femme fatale, al estilo de clásicos como Raymond Chandler.
La narración avanza con un ritmo que mantiene la tensión. A través de la historia, Montero explora temas profundos como la identidad, la memoria y lo que significa ser humano en un mundo donde la tecnología avanza sin freno. Bruna Husky, como rep, tiene una vida limitada, eso lo recuerda constantemente, lleva la cuenta del tiempo de vida que le queda, a lo que se suman las dificultades que enfrenta para adaptarse a su nuevo cuerpo, y en ese contexto lucha por recuperar su identidad y la independencia. Es un personaje muy interesante, que nos deja pensando en nuestras propias debilidades.
“Animales difíciles” no solo es una novela de acción y misterio, sino también una obra que busca concienciar sobre los peligros de una superinteligencia desconocida y el radicalismo ideológico, en este caso claramente de corte fascista. Un toque interesante es la hibridación del mundo de la cultura y las artes, con el de la política y las ideologías, en este caso remontándose al futurismo, el movimiento artístico fundado en Italia por Filippo Tommaso Marinetti, quien redactó el Manifiesto del Futurismo, publicado el 5 de febrero de 1909, la primera vanguardia italiana del siglo XX y que sirvió como base para el fascismo de Mussolini.
Rosa Montero ha afirmado que esta es su novela más profunda y que no podrá igualar su profundidad en futuras obras. En más detalle, señaló: “Me da mucha pena, pero es una novela ética. Siento que nunca más podré hacer una novela con esta profundidad y por eso debe ser la última de este personaje”. Así que los seguidores de Bruna Husky deberán conformarse con esta entrega.
“Animales difíciles” es una lectura absorbente que combina acción, conspiración y reflexión sobre el futuro de la humanidad. Rosa Montero cierra la serie de Bruna Husky, dejando al lector con una sensación de inquietud ante un futuro que no parece tan improbable, y que cada día que pasa se ve menos lejano que ese año 2111 en el que la autora situó la historia.
Ficha técnica:
Animales difíciles.
Rosa Montero. 2025
Seix Barral.
366 páginas
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