
REC, 10 años después: de la cuna del rock a la Ciudad de la Música UNESCO
Su segunda década debe consolidar su impacto internacional, fortalecer la identidad creativa de este territorio, su imagen de ciudad universitaria y generar nuevas oportunidades económicas. Biobío necesita diversificarse y la creatividad es clave para el futuro.
Más de 350 mil personas, tres escenarios simultáneos, dos días de espectáculos, 10 días de sideshows, empresas privadas comprometidas, servicios públicos coordinado, un impacto económico tangible, una ciudad llena de sonidos. Así vivimos el 15 y 16 de marzo en el Parque Bicentenario. Un sueño hecho realidad: consolidar a Concepción como la cuna del rock chileno para convertirla en ciudad creativa de la música UNESCO.
No fue fácil. En la primera versión asumimos el legado de festivales como “El Grito de Fin de Siglo” y “Rock al Sur del Mundo”, pero esta vez la apuesta era mayor. Coordinar esfuerzos entre el Gore Biobío y la Municipalidad de Concepción marcó el inicio de una alianza que luego sumó a Sernatur, uniendo cultura, economía, ciudad y turismo.
La primera edición fue un sólo día y artistas locales. Luego crecimos a dos días con invitados nacionales, para más tarde incorporar bandas latinoamericanas y, finalmente, artistas anglosajones.
Gracias al festival REC, Concepción ha disfrutado de conciertos gratuitos de Fito Páez, Garbage, Julieta Venegas, Kula Shaker, Cardigans, Los Bunkers, Los Tres y muchos más.
Hoy es el festival musical gratuito más grande de Chile y el evento cultural más relevante del sur.
Su segunda década debe consolidar su impacto internacional, fortalecer la identidad creativa de este territorio, su imagen de ciudad universitaria y generar nuevas oportunidades económicas. Biobío necesita diversificarse y la creatividad es clave para el futuro.
REC lo logró. Ahora le toca a Biobío soñar con otro futuro posible. Vamos de nuevo.
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