El ministro de Energía, Diego Pardow, explicó que “esta alza tiene su origen en el congelamiento de precios durante la pandemia, estas alzas son necesarias para el funcionamiento del sistema, no pueden seguir esperando”.
Durante el invierno, los costos de electricidad suelen aumentar considerablemente. Sin embargo, en el año 2024 se anticipa un incremento aún más significativo debido a la implementación del Valor Agregado de Distribución (VAD). Esta regulación permite a las compañías ajustar las tarifas que previamente se habían mantenido congeladas.
El ministro de Energía, Diego Pardow, explicó que “esta alza tiene su origen en el congelamiento de precios durante la pandemia, estas alzas son necesarias para el funcionamiento del sistema, no pueden seguir esperando”.
De acuerdo con esto, a partir del 1 de julio, los consumidores experimentarán aumentos en sus facturas de electricidad. Estos incrementos serán además influenciados por tres factores adicionales: el costo de la energía, el costo de distribución y los ajustes en las tarifas de transmisión.
Según la información proporcionada por la Comisión Nacional de Energía (CNE), el aumento se fundamentará en tres componentes principales: el precio de la energía, que representa aproximadamente el 70% del total y que ha permanecido invariable desde 2019; el costo de distribución, que abarca alrededor del 20%; y los cargos de transmisión, que constituyen el restante 10%.
Humberto Verdejo, académico de la Universidad de Santiago, señaló en una entrevista que los efectos de estos ajustes afectarán de manera más significativa a aquellos usuarios cuyo consumo y ubicación sean determinantes.
En Valparaíso, aquellos con gastos mensuales inferiores a $45 mil enfrentarán un incremento del 21%, mientras que en Copiapó y Puerto Montt, el alza podría alcanzar el 33% y 32%, respectivamente. Para aquellos cuyos gastos superen los $65 mil, los aumentos serán del 39% en Santiago, 51% en Copiapó y 37% en Puerto Montt.