MERCADOS
El presidente de Invermar, Roberto Izquierdo, hizo un análisis crítico de cómo ha enfrentado el gobierno las manifestaciones que se han vivido en el país estas semanas producto de la Ley de Pesca, la cual los pescadores artesanales buscan que sea anulada por ser “corrupta”. Para el empresario, “la autoridad tiene en sus manos la solución, pero tengo la seguridad de que esto va a terminar muy mal para el sector industrial pesquero”.
El presidente de Invermar, Roberto Izquierdo se refirió a cómo el gobierno ha enfrentado las manifestaciones de los pescadores artesanales, quienes critican la Ley de la Jibia y piden que se anule la «corrupta» Ley de Pesca.
“Aquí se perdió la fe pública y desde la aprobación de la Ley de Pesca de 2013 hasta ahora, salvo mejoras periféricas, no se construyeron más fábricas de procesamiento de pesca y barcos pesqueros”, señaló.
Izquierdo aseguró que el actual gobierno es “populista, no al extremo de la UP, es populista solo al nivel de la pesca. Además, este es un gobierno populista y débil”.
“Empezó la huelga con una violencia salvaje y falló el Estado de derecho. Pasó casi un mes y salieron a destruir tiendas y negocios en las inmediaciones del puerto y anunciaron el boicot de la fiesta de Año Nuevo y ahí se asustaron en el Gobierno que terminó aceptando los bonos y las pedidas de los eventuales. Todo eso se pagó con plata del fisco“, dijo en entrevista con Pulso.
El empresario asegura que podría ocurrir algo similar con la situación frente a la Ley de la Jibia. “La autoridad tiene en sus manos la solución, pero tengo la seguridad de que esto va a terminar muy mal para el sector industrial pesquero”, sentenció.
