En cadena nacional, a casi tres meses del estallido social, el Presidente adelantó los detalles del proyecto que -según dijo- será ingresado esta semana al Congreso. En términos generales, la propuesta sube en un punto la oferta inicial del Gobierno y contempla una cotización adicional del 6% a cargo del empleador: 3% irá a la cuenta individual del cotizante y el otro 3% a un fondo colectivo, que será administrado por un ente público y autónomo. Si bien el 6% ahora planteado por La Moneda coincide con el guarismo que sugiere la oposición, la diferencia sustancial es que esta última contempla que toda la cotización adicional sea dirigida a un fondo colectivo con lógica de reparto. Otro acápite dice relación con ajustes al sistema de las AFP y establece que las administradoras deberán devolver a cotizantes parte de las comisiones cobradas en caso de rentabilidad negativa.
Las pensiones aparecen como una de las principales inquietudes de la ciudadanía en este estallido social, y a tres meses del inicio de la crisis, el Gobierno decidió tomar cartas en el asunto. Este miércoles, en una sorpresiva cadena nacional, el Presidente Sebastián Piñera lanzó una nueva oferta para profundizar su reforma previsional, la que catalogó como un cambio “estructural”.
«En las últimas 12 semanas hemos escuchado con atención y con humildad la voz, fuerte y clara, de nuestros compatriotas. Y también hemos escuchado a nuestros parlamentarios, tanto de Chile Vamos como de la oposición (…). Esta semana vamos a enviar al Congreso un proyecto de ley que mejora las pensiones de todos los pensionados chilenos, actuales y futuros”, dijo el Mandatario.
De acuerdo a Piñera, esta reforma crea un «nuevo sistema previsional» basado en 3 pilares: Pilar Solidario, financiado por el Estado; Pilar del Ahorro Individual, financiado por trabajadores y empleadores; y Pilar del Ahorro Colectivo y Solidario, financiado por los empleadores y también con un aporte inicial del Estado.
En términos globales, la propuesta del Ejecutivo contempla una cotización adicional y gradual del 6% a cargo del empleador, que se sumará al 10% actual: 3% irá a la cuenta individual del cotizante y el otro 3% a un fondo colectivo. Este será administrado por un ente público y autónomo.
Con esta propuesta, el Gobierno incrementa en un punto el 5% de aumento ofrecido en el proyecto original que está paralizado en la Cámara de Diputados. Pero, si bien el 6% ahora planteado por el Gobierno coincide con el guarismo planteado por la oposición, la diferencia sustancial es que esta última contempla que toda la cotización adicional sea dirigida a un fondo colectivo con lógica de reparto.
Según el Presidente, la reforma permitirá que los actuales pensionados que tengan un mínimo de cotizaciones, recibirán 2 UF adicionales en el caso de los hombres, vale decir, $56.600, y 2,5 UF para las mujeres ($70.800), en cuanto se apruebe el proyecto.
El anuncio del Ejecutivo contempla que los futuros pensionados recibirán este mismo incremento más un aporte adicional que dependerá del tiempo que hayan cotizado después del inicio de la vigencia de esta reforma. Sin dar detalles, añade que «los adultos mayores con dependencia severa recibirán además un incremento adicional».
La propuesta del Gobierno también considera algunos elementos adicionales. Para dar respuesta a los casos de las personas que han solicitado el retiro de sus ahorros previsionales, que han llegado a la justicia e incluso al Tribunal Constitucional, contempla que en casos como enfermedades terminales, se recalculará expectativa de vida y se permitirá retirar parte de los ahorros.
De acuerdo a Piñera, “la reforma al Pilar Solidario ya implementada, unida a esta reforma, benefician a más de 2 millones de pensionados, lo que representa el 85% de pensionados de nuestro país, que recibirán incrementos superiores a $55 mil mensuales”.
Otro acápite dice relación con ajustes al sistema de las AFP y establece que las administradoras deberán devolver a cotizantes parte de las comisiones cobradas en caso de rentabilidad negativa. También estima que no podrán cobrar comisiones por inversiones en fondos mutuos nacionales, y se restringen comisiones por otros conceptos. Asimismo, se crea un Comité de Afiliados y un afiliado se integrará al directorio de la respectiva AFP.
Además, insiste en su propuesta –resistida por el mundo de las AFP– de abrir la industria a nuevos actores, como sociedades sin fines de lucro, cooperativas de afiliados y otras, de forma de fortalecer la competitividad de la industria, mejorar la calidad de los servicios, reducir las comisiones cobradas y “permitir a los afiliados participar en la creación de nuevas administradoras”.
En su discurso, Piñera hizo un llamado a la oposición al apelar “a la generosidad y a la buena voluntad de todos los sectores sociales y políticos que permita, y con urgencia, mejorar las pensiones de todos nuestros adultos mayores, lo que constituye hoy día la primera prioridad y principal demanda de nuestros ciudadanos”.
Pero al mismo tiempo insistió en el discurso de la paz social, al sostener que “es una condición necesaria para poder avanzar en esta Reforma Previsional, en la Agenda Social, en el perfeccionamiento de la Constitución, en la recuperación de nuestra economía, en la creación de empleos”.