El ministro Ignacio Briones presentó este viernes ante la Comisión de Hacienda del Senado un plan de rescate por parte del Estado a las grandes empresas consideradas «estratégicas» para el país. Sin embargo, esta connotación, que aún no tiene una definición clara, hizo saltar las dudas de varios dirigentes en la oposición y despertó resquemores, sobre todo, porque el único ejemplo dado por el jefe de la billetera fiscal durante su presentación fue Latam. Desde la comisión económica del PS advirtieron que “sólo se requiere apoyar a las empresas imprescindibles o esenciales, que no tienen sustituto alguno en el corto ni mediano plazo”, siendo que en el caso de Chile el 50% del tráfico de pasajeros lo realizan otras líneas. Mientras, el Consejo Nacional de la Democracia Cristiana señaló en el caso de ser necesario un apoyo fiscal a grandes empresas esto se debería hacer a cambio de una participación accionaria del Fisco. Por su parte, el diputado Jaime Mulet (FRVS) fue enfático en señalar que “salvar a Latam no es correcto” y que la prioridad hoy es que “los recursos vayan a los pequeños emprendedores”.
Durante una sesión de la Comisión de Hacienda del Senado, realizada la noche del último día hábil de la última semana de mayo, el ministro de Hacienda Ignacio Briones adelantó el «Marco Financiamiento de Emergencia a Empresas Estratégicas de Mayor Tamaño«, donde se propone a la Cámara Alta apoyar la continuidad de empresas viables cuya subsistencia esté en riesgo y cuando ello sea de «interés estratégico».
Sin definir aquello de «interés estratégico», Briones afirmó que la ayuda buscará un proyecto de negocios viable en términos económicos y financieros «que permita retirar el apoyo estatal en un horizonte razonable y con una remuneración adecuada a los riesgos incurridos», según reveló el medio Interferencia. En ese sentido, el titular de Hacienda explicó que el programa de apoyo debe establecer criterios de elegibilidad para asegurar que los recursos o la garantía del Estado serán destinados a empresas productivas y cuya continuidad sea, reiteró, de interés estratégico.
¿Y qué entiende el Gobierno por empresas estratégicas? Según la presentación de Briones, por ejemplo, la industria aeronáutica chilena y, en particular, Latam. El ministro de Hacienda usó como ejemplo a la aerolínea preguntándose si «¿Sería Latam elegible?». La respuesta no es directa, sin embargo, Briones asegura en la presentación que Latam contrata más de 10.000 empleados directos y, a través de la cadena de suministro aguas arriba y aguas abajo, aporta al sustento de 200.000 empleos indirectos.
Según el ministro, «las actividades de Latam tienen impacto directo, indirecto o inducido por más de US$ 6.000 millones en el PIB de Chile y US$1.750 millones en ingresos laborales».
Cabe mencionar que la fuente de las cifras, de acuerdo a la presentación, es la agencia Oxford Economics a través de un informe encargado por la misma Latam.
La comisión económica del Partido Socialista analizó la presentación del ministro de Hacienda y estimó que, en este tema, de ir al rescate de grandes empresas, se requiere ser muy precisos en las definiciones y criterios. Además, aseguran que en el trabajo uno a uno de los casos, ya que los recursos son escasos, hay usos alternativos de los mismos y particularmente existe un orden de prioridad de las necesidades (transferencias directas a sectores vulnerables, apoyo a las mipymes y municipios, etc.), donde en general se ha visto «bastante mezquindad» por parte del Gobierno y donde se juegan vidas de muchas personas.
«Es indudable que el servicio de transporte aéreo es imprescindible o esencial para la economía chilena», declaran desde el PS. Sin embargo, dicen que no es tan evidente que, en particular, la empresa Latam sea estratégica o imprescindible, ya que aproximadamente el 50% del tráfico de pasajeros lo realizan otras líneas y/o probablemente lo pueden asumir con relativa rapidez, tanto en su versión internacional como nacional.
A juicio de la coordinación económica del partido, dejar ese nivel de imprecisión en las definiciones respecto a las empresas a apoyar, deja vía libre para que el Gobierno apoye a toda empresa que le dé la gana. «Y en estos casos estamos hablando de cifras mayores, para lo cual existen bastantes usos alternativos y más urgentes de los recursos», señalaron.
Por otro lado apuntan a que Latam no se ha caracterizado precisamente por sus buenas prácticas empresariales, en Chile y en el exterior, que nos lleven a «enorgullecernos». En ese sentido ponen como ejemplo la acusación por cohecho en Argentina, por colusión en Estados Unido (LanCargo), por uso de información privilegiada de sus directores, por una historiada negociación colectiva con el personal de cabina, por dejar pasajeros botados en aeropuertos privilegiando los resultados, por los masivos despidos de las últimas semanas y meses, «por sólo mencionar algunas cosas».
Además, dicen que es «ilusorio» pensar que el dinero que se pueda levantar en Chile se ocupe para dar continuidad a las operaciones en el país y no se diluya en la red de 29 empresas que tienen operación en el resto del mundo.
«La operación de Latam en Chile es sólo una parte muy menor de su volumen de negocios y la deuda. Para recuperar su solvencia es necesario que la inyección de recursos sea tal que alcance para dar fluidez a toda su estructura, lo que dista de los ordenes de magnitud y de las fronteras de este país», comentaron.
Desde la vereda económica de la oposición, recomiendan no comprometer recursos en el holding Latam, sino que concentrar recursos y/o esfuerzos en dar continuidad al servicio al país, si se requiriera, con las empresas locales que están operando en Chile o con alternativas extranjeras en el rubro.
La advertencia es al Ministerio de Hacienda y le piden que deje de presentar el caso del holding como si sólo se tratara de la operación local del conglomerado. «En realidad, estamos hablando de la quiebra de Latam Finance Ltda., ubicada en una casilla de correos de Grand Cayman. La quiebra de Latam Finance compromete a los activos de Latam Airlines Group y sus 29 filiales, lo que implica que la única manera de que las operaciones de LATAM en Chile es el saneamiento de la empresa basada en Grand Cayman», agregaron.
Desde el PS piden al Ministerio de Hacienda que reformule el diseño de su política acerca de la continuidad de servicios que prestan grandes empresas, para «separar a las que son parte de un holding internacional cuya matriz financiera está en el extranjero, de las empresas de gran tamaño, cuya sede financiera efectivamente está en el país y solicitarle que excluya de toda posible ayuda a empresas cuya sede financiera se sitúa en alguno de los paraísos fiscales».
«En general las grandes empresas, sobre el millón de UF de ventas, pueden conseguir créditos en el sistema bancario nacional con aval de sus propios dueños o controladores principales, u holdings, sin necesidad de aval estatal. Sólo se requiere apoyar a las empresas imprescindibles o esenciales, que no tienen sustituto alguno en el corto ni mediano plazo, por lo que hay reales problemas de continuidad de la operación del servicio para el país y donde no hay opciones de financiamiento alternativo al estatal», destacaron.
Para la comisión económica del PS no cabe darle a ninguna empresa grande más facilidades, ayudas o ventajas, condiciones o garantías más favorables que a las MIPYMES.
«Consideramos que éstas han tenido altas ganancias en el pasado reciente, sus propietarios han pagado pocos impuestos y tienen espaldas financieras. Es necesario examinar caso a caso las eventuales (y pocas) grandes empresas candidatas a apoyar y tener previamente muy claras las definiciones y criterios al respecto», cerraron.
El Consejo Nacional de la Democracia Cristiana también se refirió al tema y señalaron que, en el caso de ser necesario un apoyo fiscal a grandes empresas o «empresas estratégicas», esto se debería hacer a cambio de una participación accionaria del Fisco, «valorando dicho aporte al precio de mercado vigente al momento de concretar el rescate».
De acuerdo a la minuta de los democratacristianos, también es importante establecer un subsidio a la micro y pequeña empresa, que opere independientemente y de manera adicional a las garantías de Fogape, Fogain y Crece, que permita financiar sus costos fijos durante el período de la pandemia, de manera de no continuar con la destrucción del tejido productivo que ya se está produciendo, incorporando criterios de género. «Particularmente el Estado debería apoyar directamente y en forma masiva a los Mipyme a través de de Sercotec y Corfo».
Para el diputado de la Federación Regionalista Verde Social Jaime Mulet, no cabe duda que el Gobierno está buscando la manera de ayudar a Latam. Sin embargo, a juicio de su bancada, la aerolínea no es una empresa estratégica cómo lo ha señalado el ministro Briones.
Mulet dice que en primer lugar hay que aclarar que en el listado de empresas estratégicas conforme al artículo 362 del Código del Trabajo, donde aparecen las que no pueden ir a huelga, como eléctricas y de agua por ejemplo, no está Latam, «no están las empresas aeronáuticas», asegura el parlamentario que además apunta a la relación entre el Gobierno y la familia Cueto (controladores de Latam).
«Existe un crédito que le otorgó la familia, el grupo económico del Presidente Piñera, a la familia Cueto a propósito de un negocio de Latam. Eso está publicado en todos los medios. Es una empresa que le debe a la familia Piñera, por lo tanto, creo que es algo que es importante aclarar», señaló a El Mostrador.
Para Mulet, la aerolínea no es una empresa estratégica y no solo eso. Además asegura que la industria está en decadencia. «Todo indica que la cantidad de vuelos que había antes de la pandemia se ha ido prácticamente a 0. Y para llegar a esos niveles van a pasar muchos años», comentó Mulet, quien además dijo que para tratar de salvar una empresa de la envergadura de Latam, es mejor que lo hagan los dueños. «No tiene para qué hacerlo el país», añadió.
El diputado es categórico y recomienda dejar las cosas como están, ya que una vez que vuelva la normalidad, efectivamente, va a haber vuelos y (Latam) van a poder operar rápidamente si es que se necesitan.
«Salvar a Latam no es correcto, además es una industria muy contaminante. Se calcula que el 5% de gases efecto invernadero los produce la industria aérea y eso también nos complica. Nosotros los regionalistas verdes queremos hacer el esfuerzo, después de la pandemia, de construir un mundo menos contaminado, un mundo donde podamos desarrollar otro tipo de medios de transporte, menos contaminantes», concluyó el diputado señalando como idea el desarrollo del ferrocarril como medio de transporte porque «no contamina, es más estratégico, y se puede usar la carga y el transporte de pasajeros».
Mulet finalizó señalando la voluntad de su colectividad. «Queremos que los recursos vayan a los pequeños emprendedores, que vayan a las familias que hoy no tienen para alimentarse y están pasando hambre. A las familias hacinadas, a las personas de carne y hueso que han quedado sin ingresos. Allá tienen que ir los recursos del Estado», cerró.