La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, destacó que “algunos analistas, y nosotros también estamos viendo que este retiro del 10 por ciento puede implicar un importante impacto positivo”. Su punto de vista coincide con el entregado durante la semana por analistas del mercado como Scotiabank que tras la aprobación de la ley, estimó que la inyección a consumo por el retiro de 10% tendría un impacto positivo de 3% en el PIB del 2020. La ley ya fue promulgada anoche a puerta cerrada por el Presidente y el decreto respectivo ingresará el lunes a Contraloría para su toma de razón, por lo que la próxima semana estará publicada en el Diario Oficial y los cotizantes podrán comenzar a tramitar la retirada de su 10 por ciento.
El escenario de fin de mundo que «pintaron» los detractores de la reforma que permite el retiro de fondos previsionales ha ido dando espacio a algunos análisis que apuntan a destacar el lado positivo de la ley despachada por abrumadora mayoría por el Congreso y que el Gobierno promulgó a puerta cerrada a última hora del viernes.
Ese es el foco de la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, quien planteó que “algunos analistas, y nosotros también, estamos viendo que este retiro del 10 por ciento puede implicar un importante impacto positivo”.
“Se puede incentivar la demanda, la demanda interna, y esto puede ocasionar que haya una cierta compensación en la caída (del crecimiento). Si se reactiva el consumo interno, pues eso puede estimular la demanda”, indicó.
Entrevistada en Radio Cooperativa, Bárcena subrayó que “este apoyo fundamentalmente a los estratos medios, puede ser muy relevante para reactivar la economía, porque hoy lo que estamos viendo es que las medidas no pueden ser focalizadas si no son universales, que es lo que se requiere hoy día en apoyo a esta pandemia”.
En este sentido, la secretaria ejecutiva de la Cepal dijo «que este es un apoyo en realidad muy dirigido a los estratos de ingresos medios. 8 de cada 10 habitantes de la región ganan de menos de 500 dólares al mes (unos 380 mil pesos). Estamos hablando de 490 millones de personas en toda la región y en Chile pues esto también tiene su impacto. Estamos hablando que siete de cada 10 chilenos están bajo de tres línea de pobreza».
El análisis de la Cepal se alinea con el planteado por algunos economistas que señalan que el retiro tendría además un efecto positivo en el consumo y permitiría moderar la caída en el Producto Interno Bruto (PIB) entre al menos 1 y 3 puntos. De hecho, un análisis de Scotiabank estima que la inyección a consumo por retiro de 10% tendría un impacto positivo de 3% en el PIB del 2020.
Cabe recordar que producto de la pandemia, el Banco Central proyecta una caída del PIB para este año entre 5,5 y 7,5%, y la Cepal es más pesimista y proyecta una debacle de 7,9%.
Si bien el Gobierno rechaza la reforma, sobre todo bajo el argumento de su impacto en las futuras pensiones, y trató infructuosamente de frenar su trámite, finalmente dio su brazo a torcer y decidió promulgar la ley.
Así fue anunciado anoche a través de un breve comunicado de Presidencia, que precisa que el decreto respectivo ingresará el lunes a Contraloría para su toma de razón. Solo luego será publicada en el Diario Oficial y será ley vigente a partir de ese momento, por lo que a partir de la próxima semana la ciudadanía podría comenzar a tramitar la retirada del 10 por ciento de sus pensiones.
De acuerdo a la ley, se puede retirar hasta el 10% de los ahorros previsionales con un tope máximo de 150 UF (unos cuatro millones de pesos) y un mínimo de 35 UF (un millón de pesos). Si los recursos del trabajador son menores a las 35 UF podrá retirar hasta la totalidad de su ahorro.