Para poner en contexto es importante observar algunos datos al 30 de junio de 2020, justo antes de iniciar el retiro: a) 1.963.044 afiliados tenían menos de 500 mil pesos en su cuenta de capitalización individual; b) 2.817.292 afiliados tenían menos de 1 millón de pesos, de los cuales 54% tenía menos de 30 años; c) considerando el total de 11 millones de afiliados, solo el 32,8% conseguiría retirar más de 1 millón de pesos, dado que su cuenta de capitalización individual tenía 10 millones de pesos o más; d) solamente 2.042.208 afiliados podían retirar más de 2 millones de pesos; e) 710.443 afiliados extranjeros retiraron $894.179 en promedio. Cabe hacer presente que aproximadamente 1 millón de afiliados son extranjeros. Creo que estos números son suficientes para mostrar la precariedad de nuestro sistema de pensiones. La otra mitad de la verdad dice que 2 millones de afiliados no tenían realmente fondos en su cuenta de capitalización individual.
Cuando se carece de argumentos reales o simplemente por torpeza e incluso por interés propio, para algunos resulta conveniente recurrir a datos sin un contexto de análisis. Los chilenos ya hemos tenido suficiente de eso, con variados “personajes” públicos recurriendo a una retórica altisonante, obsesionados con repetir números de la manera más conveniente para defensa de su posición.
Este ha sido el caso de los datos entregados por diversas personas respecto de los resultados del primer retiro de los fondos de pensiones, conocido también como “retiro del 10%”, en una clara muestra de lo patéticas que pueden llegar a ser las intervenciones de ciertos “expertos”.
En la columna del 13 de octubre, quedó claro que con el primer retiro no ocurrió el anunciado apocalipsis en nuestro mercado de valores y cambiario; las cuotas de los fondos de pensión, a la fecha de hoy, están todas con valores más altos que previo al retiro de fondos y el dólar sigue favoreciendo notablemente a los exportadores, con valores sobre los $790. También, se aclaró que las personas no salieron a despilfarrar su dinero en televisores o cosas que se parezcan, según vaticinaban algunos.
Finalizando este proceso, queda aún analizar cuál fue el real impacto que tuvo el retiro en cuentas de capitalización individual, razón por la cual a continuación se coloca la información pertinente y disponible en el sitio web de la Superintendencia de Pensiones.
Al 8 de octubre, de un total de 11 millones de afiliados, 9 millones de afiliados activos han retirado en promedio $1.387.517, como también 450 mil afiliados pensionados retiraron un promedio de $1.538.106. En ambos casos el monto más recurrente fue 1 millón de pesos aproximadamente, esto es, el valor permitido para la primera cuota de retiro.
Para poner en contexto nuestro análisis, es importante observar algunos datos al 30 de junio de 2020, justo antes de iniciar el retiro:
a) 1.963.044 afiliados tenían menos de 500 mil pesos en su cuenta de capitalización individual.
b) 2.817.292 afiliados tenían menos de 1 millón de pesos, de los cuales 54% tenía menos de 30 años.
c) Considerando el total de 11 millones de afiliados, solo el 32,8% conseguiría retirar más de 1 millón de pesos, dado que su cuenta de capitalización individual tenía 10 millones de pesos o más.
d) Solamente 2.042.208 afiliados podían retirar más de 2 millones de pesos.
e) 710.443 afiliados extranjeros retiraron $894.179 en promedio. Cabe hacer presente que aproximadamente 1 millón de afiliados son extranjeros.
Creo que estos números son suficientes para mostrar la precariedad de nuestro sistema de pensiones. La otra mitad de la verdad dice que 2 millones de afiliados no tenían realmente fondos en su cuenta de capitalización individual.