PAÍS
Francisca Crispi y Patricio Meza, presidenta en Santiago y vicepresidente nacional, respectivamente, criticaron el mensaje que se está entregando a la ciudadanía en cuanto a que la situación es mejor que en las últimas semanas, lo que impide a la población dimensionar el verdadero riesgo que implica el contagio y sobre todo teniendo en cuenta que las cifras demuestran un alza en todos los frentes, incluida la ocupación de camas críticas. Por su parte el exministro Osvaldo Artaza llamó la atención sobre el ritmo de vacunación, que tampoco se condice con lo que se está transmitiendo a la gente.
Siguen las reacciones desde los y las especialistas en torno a las medidas para controlar el alza de contagios de COVID-19 anunciadas ayer por el Ministerio de Salud, luego que en primera instancia el ministro Enrique Paris adelantara posibles situaciones de restricción a la movilidad, como una cuarentena total en la Región Metropolitana, pero llegado el momento, el titular de Salud rectificó, asegurando que las cifras en la región eran «alentadoras», lo que en la práctica se tradujo en un índice de 4% de positividad, que es un número bajo, pero insuficiente para tomar una determinación que sea útil en el contexto de alza generalizada de contagios y hospitalizaciones, en la gran mayoría de las regiones del país.
En este contexto se entiende que hoy, particularmente desde el Colegio Médico (Colmed) de Santiago, hayan salido a precisar el alcance de las cifras y particularmente las palabras del ministro en relación con la «comunicación de riesgo», elemento clave entre el conjunto de medidas que es recomendable tomar.
Francisca Crispi, presidenta del Colmed en Santiago partió por dudar de lo que Paris llamó una «estabilización» de las cifras en la región. «No estoy de acuerdo con el término de estabilización, es muy precoz la situación para hablar de eso (…). Hay que mirar las cifras con cautela», dijo la doctora en conversación con radio Duna.
Crispi también se pronunció sobre la frase del día ayer, las «cifras alentadoras» que, según Paris, hicieron no considerar la cuarentena. Para ella es una impresión del ministro que se aleja de la realidad. «Cifras alentadores suena como muy buen escenario y no estamos en un buen escenario (…). La situación no es alentadora, hay que tener cuidado con el mensaje que se da a la ciudadanía», afirmó.
En este sentido, la doctora pidió al Gobierno que reconsidere la opción de la cuarentena, especialmente cuando el sistema hospitalario en cuanto a camas UCI se encuentra, en la región, en un 80% de capacidad. «Creo que es una situación razonable que el Gobierno va a tener que evaluar en los próximos días», sostuvo.
Por su parte, el académico de la Universidad de Chile Cristóbal Cuadrado, enfatizó que «la situación en la Región Metropolitana está muy lejos de ser alentadora», como planteó en La Tercera.
En términos similares reaccionó el médico Patricio Meza, vicepresidente del Colegio Médico. El doctor se mostró alarmado por el mensaje que llega desde el Minsal. «Palabras como las de ayer nos preocupan porque estamos en un escenario donde, por un lado, se están dando permisos para ir de vacaciones, otro ministro discutiendo volver a clases y otro ministro dice que hay un panorama alentador. La comunicación de riesgo es muy errática y la comunidad no lo entiende como tal», dijo a radio Pauta, poniendo en duda la eficacia de lo que se ha llamado «comunicación de riesgo».
Meza coincidió con la doctora Crispi al sugerir que «es el momento hoy de tomar medidas bien estrictas, que nos permitan de forma categórica disminuir el número de contagios», afirmó.
Otro tema que causa preocupación entre los especialistas en salud fuera del Gobierno, es el mensaje que se está entregando en torno a las vacunas, como si fueran la solución para acabar definitivamente con los contagios y, por consiguiente, iniciar un retorno inmediato a la normalidad.
“Nos vamos a demorar con el asunto de las vacunas. En el primer semestre vamos a tener apenas a los trabajadores de la salud y a los adultos mayores, y sectores marginales de la población vacunados. Los países ricos se están apropiando de la vacuna y a los otros países nos están mandando la gota. Si alguien piensa que vamos a estar luego vacunados, olvídelo”, dijo en radio ADN el doctor Osvaldo Artaza, exministro de Salud.
En esto también coincidió Patricio Meza, vicepresidente del Colmed. «El mensaje que se está transmitiendo a la comunidad es que con la vacuna se va a solucionar todo y esto no es así. Para que la vacuna cumpla un rol de salud pública, protector, necesitamos tener vacunadas 15 millones de personas en el país y aún estamos a meses de eso», puntualizó.
En opinión de Meza «se le ha dado mucho exitismo a la vacuna, pero la mejor vacuna es la autoprotección, el uso de la mascarilla, el distanciamiento social, físico, el lavado de manos», afirmó. El problema en el sentido de generar la credibilidad en el autocuidado como medida esencial, es uno de los grandes asuntos en los que el Gobierno está al debe. «Hay que hacerse cargo de que estamos en un momento en que nadie le cree ni confía en nadie respecto de estas materias y eso es grave”, dijo Artaza. «La clave está en que podamos aprender a convivir con la situación de la pandemia, lo que no hemos logrado por dos razones: la trazabilidad nunca la hemos podido instalar plenamente (identificar, aislar, tratar a las personas que tienen contagios)” y “segundo, no hemos logrado comunicar a la población el riesgo que implica esta pandemia, y a mantener disciplinadamente las medidas sanitarias”, agregó.
