El ex presidente y senador de RN insistió en que no es el momento de buscar candidaturas como si de concentrarse en las elecciones de la Convención Constitucional. Por eso consideró una «mala idea» que el ministro Ignacio Briones deje el gobierno. Larraín mostró su simpatía hacia Sebastián Sichel, discrepando con Evelyn Matthei respecto de que sea el elegido de los empresarios «¿De donde saca eso? Si Sichel no viene saliendo de Harvard, Yale o el Club de la Unión», dijo.
Carlos Larraín se tomó un receso de su retiro en el sur de Chile para intervenir en el proceso interno que vive su partido, donde se ha programado un Consejo General para este sábado. En el encuentro probablemente sea proclamado como candidato presidencial Mario Desbordes, algo a lo que Larraín se opone.
No creo que por mucho madrugar amanezca antes y esta proliferación de candidaturas no despeja la situación que es complicada. No nos vaya a pasar lo de la izquierda que tiene como 14 candidatos pero en los hechos no tiene candidato. Tener muchos candidatos no significa tener candidato en singular. Y eso es lo que me hace pensar que hay que esperar hasta las elecciones de abril que van a ser tan amplias y tan profundas que van a marcar camino y van a significar una nueva época en la política chilena. Creo que eso es innegable. Para qué apurarse tanto en crear tareas distractivas. Yo me concentraría en las super elecciones de abril. No estaría impulsando candidaturas que contribuyen poco y por lo demás están postulando personas que figuran escasamente en las encuestas», dijo en conversación con radio ADN.
Consultado si mantiene alguna animadversión hacia Mario Desbordes, Larraín reconoció que «No es cuestión de gustos afectivos es una cuestión de fondo. Yo estuve con Mario Desbordes hasta noviembre del 19. Era el momento de abrir la billetera pero en cambio no era el momento de echar abajo la Constitución. Yo era partidario de cambiar la constitución, pero no de echarla abajo, me pareció una mala idea. Lo que le reprocho es que haya echado abajo la Constitución», enfatizó. Según Larraín «la que más celebro la intervención de Mario Desbordes en el acuerdo de noviembre fue doña Pamela Jiles. Me remito a un mensaje que despachó ella que decía ‘hay que reconocerle a Mario Desbordes el gran éxito del 15 de noviembre’», dijo.
Sobre la posible salida del Ministro de Hacienda Ignacio Briones, para entrar en la carrera presidencial, el ex senador de RN tampoco estuvo de acuerdo. «Quieren sacar a Briones, que trabajar con Sebastián Piñera no es una cosa fácil, yo sé de lo que hablo, y lo quieren animar a ser candidato presidencial, es otra cara más, más confusión… Creo que es pésima idea que a Ignacio Briones lo empujen a ser candidato presidencial”, afirmó.
Más que con Desbordes, Larraín mostró simpatía hacia Sebastián Sichel. Aunque insistió en que no tiene candidato, discrepó con Evelyn Matthei en cuanto a que el ex presidente de Banco Estado es el candidato de los empresarios. «Creo que Evelyn Matthei se equivoca al decir eso, porque es precisamente es el lanzazo que le van a pegar a Sichel, el pinchazo de que es el candidato de los poderes fácticos, si es que llega a ser candidato. ¿de donde saca eso? Si Sichel no viene saliendo de Harvard, Yale o el Club de la Unión».
Por último, celebró el pacto de Chile Vamos con el partido de José Antonio Kast. «Yo no veo extrema derecha en Chile, no veo ese fenómeno para nada, lo que sí veo es una extrema izquierda increíblemente activa. José Antonio Kast no es un hombre de extrema derecha, no sé qué significa ser de extrema derecha en Chile”, dijo y agregó «La unidad paga, la unidad da dividendos», finalizó