Las cifras del estudio de opinión pública “Pueblos Originarios y Nueva Constitución”, del Centro de Estudios Interculturales e Indígenas (CIIR), se conocen en momentos en que la presidenta de la Convención nuevamente se ve enfrentada a la derecha, a la que acusó de “fomentar” las críticas al órgano constituyente e inventar “realidades inexistentes”. Desde este sector redoblaron sus críticas a Loncon, aunque el estudio demostró que la ciudadanía valida varias de las medidas que se han ido implementando en la Convención: un 85% respalda que existan intérpretes de las lenguas de estas comunidades, un 79% apoya la traducción a aquellas de los documentos oficiales de la Convención, un 74% aprueba la inclusión de las banderas de los pueblos originarios en los actos protocolares (74%) y un 71% que exista una consulta específica para ellos en función de su derecho a la libre determinación y autonomía. Otro resultado relevante indica que el 95% está de acuerdo con entregar reconocimiento constitucional a los pueblos indígenas que habitan Chile.
A casi dos meses de iniciado el trabajo de la Convención Constitucional, la cual incluye la presencia de 17 convencionales provenientes de los Pueblos Indígenas que habitan Chile, el Centro de Estudios Interculturales e Indígenas (CIIR) publicó los resultados de la cuarta medición de su Estudio de Opinión Pública Pueblos Originarios y Nueva Constitución.
Este estudio incluyó por primera vez un capítulo de preguntas acerca de la evaluación del trabajo de la Convención Constitucional, el poniendo énfasis en el rol que han cumplido los convencionales indígenas. Así, un 81% está de acuerdo con que una mujer indígena encabece la Convención, en este caso Elisa Loncon, quien cuenta con un respaldo a su gestión del 66%. La cifra aumenta a un 76% entre quienes se identifican como población indígena y afrodescendiente.
Las cifras se conocen en momentos en que la Convención se encuentra en plena fase de sistematización de las propuestas de Reglamento, y luego que la presidenta de la instancia saliera a responder algunos estudios que han demostrado una caída en la confianza ciudadana hacia el órgano constituyente.
Ayer, Loncon abordó este escenario, señalando que «se inventan realidades inexistentes» y «lamentablemente hay gente que se queda con esa información». «Mucha de esa aprobación o reprobación también ha sido fomentada por sectores que no están de alguna manera validando el trabajo de la Convención y ustedes lo saben», comentó la presidenta, apuntando al sector de Vamos por Chile.
Estas declaraciones nuevamente enfrentaron a Loncon con la derecha «dura» de la Convención Constitucional. Una de ellas provino de la convencional Teresa Marinovic, quien en su cuenta de Twitter señaló que «hay que explicarle a Loncon que no es la confianza de la convención la q ha caído, es la confianza en una clase política debutante que muestra los mismos vicios, si no peores, que la anterior».
En la misma línea, el convencional Ruggero Cozzi (RN) sostuvo que hay una “inmadurez política de quienes dirigen la CC: incapacidad y falta de humildad para reconocer los propios errores”, mientras Katerine Montealegre (UDI) expresó que «aumento de asignaciones ‘imaginario’, con solicitud de indulto ‘imaginario’, con privilegios ‘imaginarios’, con disfraces ‘imaginarios’. Uno pensaría que es la nueva versión del ‘hombre imaginario’ de Nicanor Parra, pero no, es Loncon negando el desprestigio que han causado».
Con todo, el estudio respaldó varias de las medidas que se han ido implementando en la Convención. De hecho, existe un amplio respaldo a que esta considere de forma permanente a las lenguas de los pueblos originarios en su gestión: un 85% respalda que existan intérpretes de las lenguas de estas comunidades, mientras un 79% apoya la traducción a aquellas de los documentos oficiales de la Convención.
Otro punto que genera amplio consenso, es la inclusión de las banderas de los pueblos originarios en los actos protocolares (74%) y que exista una consulta específica para ellos en función de su derecho a la libre determinación y autonomía (71%).
Otro resultado relevante indica que el 95% de los encuestados está de acuerdo con entregar reconocimiento constitucional a los pueblos indígenas que habitan Chile. Esta cifra es afín con mediciones anteriores, en las cuales los porcentajes fueron 96% (marzo 2021) y 95% (septiembre de 2020), respectivamente.
Con respecto a la pregunta sobre qué rango de reconocimiento debiese entregarse, un 47% opta por la declaración de un Estado multicultural, mientras un 20% se inclina por un Estado plurinacional. En tanto, un 32% mantendría la actual estructura de Estado-Nación.
Enseguida, un 88% de los encuestados está de acuerdo con reconocer a la naturaleza como sujeto de derecho; un 79% de los consultados apoya que los distintos pueblos originarios sean educados en sus propias lenguas; un 81% que cuenten con representación especial en gobiernos regionales y locales, mientras un 82% asiente con respecto a entregar representación especial en el Congreso. Además, 81% concuerda con el derecho de los indígenas a la propiedad comunitaria de sus territorios.
En cuanto a un posible reconocimiento de espacios de jurisdicción indígena, un 72% de los encuestados lo apoya, mientras que la posibilidad de que ciertos territorios posean administración indígena cuenta con un 62% de respaldo. Mismo porcentaje sustenta la moción del reconocimiento a la libre determinación y autonomía de los pueblos originarios.
Acerca de la pregunta sobre cómo el Estado debiese solucionar el conflicto con los pueblos originarios, un 35% de los encuestados apuesta por el reconocimiento constitucional, mientras un 34% por la restitución de tierras.
Por último, la opción de contar con una especie de policía comunitaria en territorios indígenas reúne el apoyo del 59% de los encuestados.
Publicado por primera vez en abril de 2020, este instrumento busca revisar cómo la ciudadanía indígena y no indígena percibe las demandas de diverso tipo cifradas por los Pueblos Originarios y cómo han evolucionado en la medida que el proceso constituyente se desarrolla.
El estudio, de carácter telefónico, consideró 1.523 casos, distribuidos en 109 comunas de Chile que cumplieran con una población mayor a 50.000 habitantes. El 19,9% de los encuestados se identificó como indígena o afrodescendiente, mientras que el 78,8% como no indígena.