En la sesión de hoy se sometió a la votación del pleno las propuestas de Vamos por Chile, que fue el único sector de la Convención Constitucional en presentar indicaciones y solicitó la votación de 30 normas del reglamento por 2/3, una cifra que el abogado constitucionalista Fernando Atria consideró “exagerada”. Todas fueron rechazadas por el pleno, incluso el artículo 94º que establece la votación por dos tercios para la aprobación de las normas constitucionales en la futura Carta Magna, por lo que cuando sea votado en particular la próxima semana debe ser ratificado por mayoría simple, tal como esperaban sectores de oposición como el Colectivo Socialista, el FA e Independientes No Neutrales. Zanjado este punto, la Convención también aprobó en general las propuestas de Reglamento General, además de los reglamentos de Ética, de Participación y Consulta Indígena, de Participación Popular y Equidad Territorial, y las Bases, principios y normas de Derechos Humanos, y se abrió un plazo de indicaciones para pasar a la votación en particular la próxima semana [ACTUALIZADA]
En una decisión clave, el pleno de la Convención Constitucional definió que todas las normas del reglamento general se definirá por mayoría simple (78 convencionales), y no por 2/3 (103 convencionales), como pedía la derecha, incluyendo el artículo 94 que establece dicho quórum para la aprobación de las normas constitucionales una vez que el órgano constituyente entre al fondo de la discusión de la futura Carta Magna.
En la sesión de hoy, donde el pleno también aprobó las propuestas de reglamento general, Ética, de Participación y Consulta Indígena, de Participación Popular y Equidad Territorial, y las Bases, principios y normas de Derechos Humanos, el foco estuvo puesto en la votación sobre las propuestas de Vamos por Chile respecto a las normas a aprobarse con 2/3.
La derecha fue el único sector de la Convención Constitucional en presentar indicaciones y pidió que 30 normas del reglamento sean definidas por dicho quórum, una cifra que el abogado constitucionalista Fernando Atria consideró “exagerada”.
Fue una discusión candente, y tras el debate de una hora, se procedió a la votación, pese a los intentos de algunos convencionales para extender el tiempo de intervenciones.
Así, fueron quedando en el camino las indicaciones de la derecha que pedían votación de 2/3 en materias como clausura del debate, aplazamiento de una votación, abstenciones, los efectos de un empate en una votación, votos válidos, entre otros, donde solo se pronunciaron a favor los convencionales de la bancada de Chile Vamos, con ligeras variaciones.
Pero todas las miradas estaban puestas en el artículo 94º “respecto a la aprobación de las normas constitucionales, el cual regula la votación de normas constitucionales en el pleno”, y que establece la votación por dos tercios cuando se entre a la discusión de los contenidos de la Carta Magna.
La indicación de la derecha fue rechazada por 29 votos a favor, 115 en contra y 7 abstenciones en el hemiciclo, y estas corrieron por cuenta de los convencionales de Vamos por Chile, Cristián Monckeberg, Harry Jurgensen, Raúl Celis, Luis Mayol, Bernardo Fontaine, Roberto Vega y Paulina Veloso.
En lo medular, esto significa que cuando el artículo sea votado en particular la próxima semana debe ser ratificado por mayoría simple, tal como esperaban sectores de oposición como el Colectivo Socialista, el FA e Independientes No Neutrales, y no por dos tercios, como pretendía la derecha.
“Ahora se estableció una forma de votar que es por mayoría, y ahora todo el reglamento general se va a votar por mayoría la próxima semana cuando se voten las indicaciones que vamos a presentar mañana y pasado”, explicó Ricardo Montero, del Colectivo Socialista.
En el fondo, la ratificación de los dos tercios será por mayoría simple, pero cuando la discusión avance a los contenidos la votación será por dos tercios, tal como establece el artículo 133 de la Constitución, explicaron desde el Colectivo del Apruebo.
“Vamos a respetar a cabalidad las normas de dos tercios en las normas constitucionales propiamente tales y estamos respetando lo que dice el artículo 133 de la Constitución respecto de que lo que se somete a dos tercios son las normas constitucionales, y no estando en esos momentos constitucionales se vota simplemente por mayoría”, acotó un integrante de dicho colectivo.
Desde este espacio reforzaron esta tesis señalando que “creemos que la propuesta de Chile Vamos excede las normas que requieren 2/3”, y precisaron que dado que “se debe dar rapidez y certeza a la forma de trabajar de la Convención y por eso, somos de la idea de que las normas reglamentarias previas, deben ser aprobadas por mayoría y no por quórum de 2/3, caso contrario el proceso se hace muy lento y no permitirá tener terminado el proceso dentro del periodo de 12 meses que nos entregó el país”.
Zanjado este punto, la Convención prosiguió con la votación de las enmiendas planteadas por la derecha y aprobó en general las propuestas de Reglamento General, planteado por la Comisión de Reglamento, por 145 votos a favor, 6 en contra y 1 abstención, además del Reglamento de ética y convivencia; prevención y sanción de la violencia política y de género, discursos de odio, negacionismo y distintos tipos de discriminación; y de probidad y transparencia en el ejercicio del cargo, propuesto por la Comisión de Ética; el Reglamento de Participación y Consulta Indígena, propuesto por la Comisión de Participación y Consulta Indígena.
Asimismo, también aprobó en general el Reglamento de mecanismos, orgánica y metodologías de participación y educación popular constituyente, propuesto por la Comisión de Participación Popular y Equidad Territorial, con informe de la coordinación respectiva; y las Bases, principios y normas de Derechos Humanos, Individuales, Colectivos, Ambientales y de la Naturaleza, formulada por la Comisión de Derechos Humanos, Verdad Histórica, y Bases para la Justicia, Reparación y Garantías de No Repetición, con informe de la coordinación respectiva.
Ahora, se abre un plazo de 48 horas para presentar indicaciones para la discusión en particular, que se registrará la próxima semana. Cada enmienda debe estar patrocinada por 30 constituyentes.
Durante las intervenciones, Cristina Dorador (Movimiento Independientes del Norte) planteó que “el quorum de 2/3 no garantiza avanzar en los cambios transformadores que los pueblos de Chile han mandatado”. Adriana Ampuero (ex Lista del Pueblo) sostuvo que “este quórum tiene su origen en dictadura y es un enclave autoritario de la Constitución del 80” y su colega
Tania Madriaga, del mismo sector, sentenció que “este quórum representa una garantía para la élite”. Por su parte, el constituyente atacameño Félix Galleguillos rechazó que se aplique este quórum a ciertas normas del reglamento de la Comisión de Participación y Consulta Indígena.
Natividad Llanquileo, constituyente mapuche, insistió en este punto y recalcó que “algunos se entienden soberanos para cuestionar las obligaciones internacionales de DDHH (…) pero cuando se trata de mantener un quórum antidemocrático, defienden que somos un poder derivado para mantener un quórum que atenta en contra las decisiones de la mayoría”.
El PC se cuadró contra los dos tercios, y así lo expresó el exministro Marcos Barraza: “Lo que está en discusión hoy es si en esta Convención radica el poder soberano mandatado por el pueblo o este poder está limitado por las elites y los privilegiados y privilegiadas que también son parte de esta Convención Constituyente (…) Creo que aquí no pueden haber restricciones a la soberanía del pueblo constituyente”.
Desde el otro lado, el PPD Felipe Harboe sentenció que “dos tercios con una hoja en blanco para poder discutir sin vetos es una oportunidad enorme para poder dar estabilidad” y el DC Fuad Chahin indicó que “es una falacia decir que los 2/3 respecto a una hoja en blanco tiene el mismo efecto que los 2/3 de la Constitución del 80 (…) Cuando se parte en una hoja en blanco nos obliga a ponernos de acuerdo”.
La UDI Constanza Hube, en tanto, sentenció que “el quórum debe ser respetado nos guste o no. Por nuestro lado la ciudadanía tiene esa garantía”. De paso, disparó contra quienes pretender modificar esa mayoría: “Un grupo importante de convencionales constituyentes no creen en la casa de todos, si no de algunos o algunas”.
El independiente Mauricio Daza, en tanto, fue enfático en que “debemos mantener la regla de los 2/32, porque “las reglas constitucionales deben tener estabilidad que se establece a partir de un consenso amplio”. “Ahora, aquello que no quede en la Constitución deberá ser materia de ley a través de un nuevo Congreso que deberá ser bicameral, paritario. Creo que debemos mantener el quorum de 2/3 no porque no podamos cambiarlo, sino porque creo que dará la estabilidad mínima que requiere una Carta Fundamental”, dijo.
En la misma línea, la periodista Patricia Politzer de Independientes No Neutrales fue enfática en que “los 2/3 pasaron a ser de un quorum maligno a un quorum virtuoso, si queremos una Constitución que permanezca estable durante 40 o 50 años es indispensable que sea aprobada por una amplia mayoría. Hoy por primera vez tenemos la posibilidad de cambiar el rumbo del país con una mayoría sólida”.
Y Fernando Atria (ind. Apruebo Dignidad) refutó tanto a la derecha por seguir “pensando con la lógica de la Constitución de 1980”, pero también a quienes que se oponen a los dos tercios. “Hoy mismo escuchamos decir que la regla de los 2/3 es el último cerrojo de esta Constitución, cuando ahora lo que tenemos al frente es la labor de escribir una Nueva Constitución desde una hoja en blanco, mal podría haber un cerrojo que protege una hoja en blanco. El hecho de que tengamos ante nosotros una hoja en blanco es un logro del pueblo de Chile que irrumpió el 18 de octubre para desahuciar la Constitución Tramposa”, indicó.
En una postura similar, el convencional Christian Viera (Lista del Apruebo) sostuvo que “el punto es que el cambio a esta regla (2/3) no lo podemos hacer nosotros y los sabemos, tengo la impresión que todavía no logramos advertir la oportunidad que tenemos en las manos. Tenemos la posibilidad de escribir la nueva Constitución desde una hoja en blanco. Esto no es una reforma a la Constitución de la dictadura, es un proyecto nuevo, y no podemos desperdiciar esta oportunidad. La Constitución debe proyectarse y permanecer, que no dependa de contingentes mayorías electorales”.
Sin embargo, dentro de la oposición también hubo voces disidentes, como la del escritor Jorge Baradit (Colectivo Socialista), quien recordó que el “quorum de los 2/3 ha estado relacionado a procesos constituyentes vinculados a gobiernos autoritarios, hay quórums mucho mejores para asegurar el acuerdo y el consenso”. “La regla me pareció antes y me parece mal ahora (…) las reglas del juego se cambian todo el tiempo”, añadió.