Si tiene que ponerle una nota del 1 al 7 al trabajo de la Convención Constitucional, el ministro Esteban Valenzuela le pone un 6.3. Desde su visión, la convención ha dejado felices a un porcentaje importante de la población que se dedica a la pequeña agricultura y a los pueblos indígenas. En cuanto a la crisis que vive la economía rural campesina y al temor global por la seguridad alimentaria, Valenzuela es categórico en afirmar que en Chile ese temor es infundado. «Nosotros hemos dicho hasta el cansancio que en Chile no hay una crisis alimentaria por razones estructurales, y esto lo comparten estudios internacionales», asegura. Es mas -agrega- al ser Chile una potencia mundial en la exportación de frutas «ayudamos a la seguridad alimentaria de muchos países».