La climatóloga fue una de las que se anotó un triunfo con el cierre de la fundición Ventanas, cuestionada tras años de episodios de intoxicación entre la población de Quintero. Previamente, dio una fuerte señal política al bucear en la caleta de Chañaral de Aceituno, en el Archipiélago de Humboldt donde se pretende instalar la minera Dominga, tras años de fuertes resistencias locales. Aunque no se refirió específicamente al tema, ya que ella preside el Comité de Ministros que definirá el futuro del proyecto, el mero recorrido submarino por el sector fue considerado por los pescadores que se oponen al proyecto minero como un espaldarazo a la necesidad de protección. «Chile emprende un camino de desarrollo que no puede seguir siendo a costa de una naturaleza que necesitamos para nuestro bienestar”, dijo la científica sobre el primer caso. «El estilo de la ministra Maisa Rojas se caracteriza por la proximidad y cercanía con públicos cuyos temas de su cartera resultan de mucho interés. A pesar de ser una científica ‘dura’ comunica muy bien y resulta creíble. Conecta con la valoración positiva que la ciudadanía tiene en relación a los temas medioambientales. Especialmente en los jóvenes la temática y su discurso resultan coherentes. La última encuesta nacional de medioambiente muestra cómo ha crecido el interés de los jóvenes por estos temas», destaca Marco Moreno, decano de la Facultad de Ciencia Política y Administración Pública de la Universidad Central de Chile.
Proyección política. Eso fue lo que la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas obtuvo en lo personal con el cierre de la fundición Ventanas de Codelco.
“El mensaje político es clarísimo, y es que Chile emprende un camino de desarrollo que no puede seguir siendo a costa de una naturaleza que necesitamos para nuestro bienestar”, señaló la climatóloga en la ocasión.
Ahora el gobierno deberá enviar un proyecto de ley al Congreso para concretar el cierre, donde podría sufrir el rechazo de la oposición. Sin embargo, el Ejecutivo tiene un as bajo la manga: la modificación del Decreto Supremo 28 de 2013, del ministerio que justamente encabeza Rojas.
Este decreto establece la Norma de Emisión para Fundiciones de Cobre y Fuentes Emisoras de Arsénico. Hoy, la norma exige el 95% de captación de los gases y partículas que generan las fundiciones, pero una modificación podría elevar esta cifra al 98% y daría el golpe de gracia a la fundición de Codelco.
En la encuesta Plaza Pública de Cadem, correspondiente a la cuarta semana de junio, Rojas figura en la mitad de la tabla.
Sin embargo, con un conocimiento en torno al 30%, está por delante de figuras como la canciller Antonia Urrejola, Jeannette Jara (Trabajo y Previsión Social) o Julieta Brodsky (Cultura).
«Maisa Rojas se ha consolidado como una ministra no solo sólida técnicamente, sino que además con buen manejo político», señala el analista Germán Silva Cuadra.
«Es una mujer de terreno, lo demostró buceando en el archipiélago de Humboldt. En el caso de Ventanas tuvo un relato firme y decidido al señalar que todas las empresas iban a salir del sector y que Chile iba a la desfosilización. También le hablo duró a los dirigentes de Codelco. La señal política de ‘se van’ es muy potente», expresó.
En términos similares se manifestó Marco Moreno, decano de la Facultad de Ciencia Política y Administración Pública de la Universidad Central de Chile.
«El estilo de la ministra Maisa Rojas se caracteriza por la proximidad y cercanía con públicos cuyos temas de su cartera resultan de mucho interés. A pesar de ser una científica ‘dura’ comunica muy bien y resulta creíble. Conecta con la valoración positiva que la ciudadanía tiene en relación a los temas medioambientales. Especialmente en los jóvenes la temática y su discurso resultan coherentes. La última encuesta nacional de medioambiente muestra cómo ha crecido el interés de los jóvenes por estos temas», destaca.
«Dos atributos son claves para el desarrollo del capital político: credibilidad y coherencia entre lo que se dice y hace. Aquí radica buena parte del apoyo que una ministra técnica y sectorial tiene en términos de imagen positiva».
Un ejemplo de esto último es su visita a Chañaral de Aceituno, en la Región de Atacama, el pasado 10 de junio. Puede haber pasado desapercibida, pero encaja plenamente en el concepto de Transición Socioecológica Justa que en sus palabras «es el paraguas del plan de Gobierno», como mostró en Ventanas.
En esa zona se pretende instalar el proyecto minero Dominga, una iniciativa de 2.500 millones de dólares de la familia del empresario Carlos «Choclo» Délano, que lleva diez años de tramitación ambiental. Aunque no comentó el proyecto in situ, en una fuerte señal política la ministra no sólo visitó el lugar, sino además buceó allí.
En el lugar se realizó la reunión del Comité Birregional por el Área Marina Costera Protegida “Archipiélago de Humboldt”, en lo que de materializarse se conformaría como un Áreas Marinas Costeras Protegidas de Múltiple Uso (AMCP – MU) .
La ministra Rojas podría haber optado por no asistir a este encuentro, en lo que es una caleta de pescadores. Sin embargo, no sólo optó por asistir, sino que además recibió personalmente de manos de Luis Cortés, dirigente de la Asociación Gremial de Pescadores y buzos artesanales de Caleta Chungungo, una misiva donde los trabajadores le pidieron resguardar el lugar.
Pero no fue todo. Rojas además se dio el tiempo de bucear en el lugar y de contar su experiencia en un video.
«Acabo de bucear en la reserva marina Isla de Chañaral, parte del archipiélago de Humboldt. Camino para acá, además tuvimos la suerte, muy especial, de ver una ballena jorobada. En el poco rato que estuve, tuve la suerte de conocer y ver la biodiversidad única de este lugar, un lugar que sin duda hay que cuidar y proteger», dijo.
Estas declaraciones resultan aún más relevantes tomando en cuenta que la ministra preside el Comité de Ministros, integrados por seis secretarios, que deberá decidir si autoriza o no el proyecto minero.
Su visita además dejó una buena impresión en los habitantes de la zona, como el buzo y documentalista César Villarroel, autor del film «Archipiélago de Humboldt, paraíso en peligro».
«Para nosotros ha sido un hito muy importante la presencia de la ministra de Medio Ambiente acá en el lugar, que se haya podido reunir con representantes de todas las comunidades del Archipiélago de Humboldt, con todos los dirigentes, con todos los actores locales, que la hayan podido ver y acceder a entregarle cartas, para que tenga una visión mucho más amplia de lo que es la realidad acá», comentó.
«Es la manera correcto que deben tener los ministros de estar en terreno y no tenerle miedo al contacto con las personas la gente», añadió.
«En el marco de eso también fue a bucear con nosotros en la reserva marina de la isla de Chañaral y pudimos hablar sobre todo de la biodiversidad, del rol importante que juegan estos lugares para la contención de los efectos del cambio climático, porque necesitamos empezar a restaurar los ecosistemas y este lugar es un sitio de esperanza para la recuperación de los océanos en el planeta para mitigar el cambio climático. Sentimos que por primera vez un ministro de Medio Ambiente está convocando a otros ministerios para que en sus planes esté el enfoque del cambio climático».
Nancy Duman, vocera de la Alianza Humboldt, señaló que la visita fue «interesante y muy esperada».
«Queríamos conocer a la máxima autoridad del medio ambiente, de quien esperamos impulse con fuerza y decisión la protección definitiva del Archipiélago Humboldt a través de la creación del Área marina Costera Protegida de Múltiples Usos bi-regional , cuyo decreto excluya la actividad industrial y garantice la participación de las organizaciones ciudadanas del territorio en todo el proceso de su gestación, implementación, elaboración del plan de administración y conducción», señaló.
Esto, a su juicio, implica subsanar los “errores” , la negligencia y corrupción de gobiernos anteriores al dejar dormir este proyecto o intentar cercenar administrativamente un ecosistema único, indivisible y de importancia vital para la conservación mundial y las actividades económicas locales sustentables de los pescadores artesanales.
«Aun cuando en su discurso predomina el compromiso ecologista, se percibe el cuidado de no hablar de temas ‘conflictivos’ abiertos como lo es el proyecto Dominga», admitió.
«Al calor de los efectos de la manipulación de las comunidades sostenida por Andes Iron, titular del proyecto Dominga, nos preocupa que vea la participación ciudadana anticipada como la oportunidad de generar mayores espacios de dialogo y entendimiento cuando la realidad demuestra lo contrario. Este espacio no se usa para mejorar los proyectos y llegar a soluciones que beneficien a todas las partes sino, más bien para presionar y ‘comprar’ apoyos».
Con todo, para Duman fue importante que diera a conocer que este año se retomará el proceso de creación del AMCP MU Archipiélago Humboldt, reconociendo su extensión entre la Región de Atacama y Coquimbo, «que será respetado su condición bi-regional».
La zona es un ejemplo paradigmático del conflicto entre el viejo modelo extractivista, representado por un minera que pretende instalarse en una zona de alta biodiversidad, y los desafíos que representa el cambio climático, en un nuevo modelo económico que necesita la existencia de hope spot como el Archipiélago de Humboldt para el equilibrio ecológico con actividades como la pesca y el turismo, ambos en modalidad sustentable.
¿Qué significa esto para proyectos como Dominga?
«Creada un AMCPMU, los proyectos de inversión que busquen desarrollarse en la zona deberán someterse de acuerdo a la ley lo indica en relación al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental», respondieron desde el Ministerio de Medio Ambiente.
«El plan de manejo del AMPCMU establecerá las estrategias, programas, zonificación y restricciones para las actividades que busquen desarrollarse al interior y en las inmediaciones del área, buscando siempre no poner en riesgo los objetos de conservación en virtud del cual el área fue creada».
A la ministra sin duda le quedan muchas Ventanas y Domingas por delante, pero, al menos en estos dos casos, ya ha dado señales potentes.