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Crédito: Agencia Uno
La Cancillería informó ayer que no patrocinará una candidatura nacional ante la Corte Internacional de Justicia, tras la vacante que dejó el juez brasileño Antonio Cançado, quien falleció el pasado 29 de mayo. «La prioridad del Gobierno de Chile es la elección del país en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas. Es ciertamente al Gobierno al que le corresponde la conducción de la política exterior», dijo el jurista Claudio Grossman, quien concitaba un apoyo transversal en la política nacional para el cargo. Grossman fue uno de los agente de Chile ante la CIJ en el marco de las demandas marítimas que enfrentó el país por parte de Perú y Bolivia. El jurista agradeció el «impresionante apoyo que existe en Chile sobre la importancia de la CIJ y la relevancia que tendría para el país que una chilena o chileno pudiera llegar en el futuro a ser juez del tribunal mundial del que hemos estado ausente por más de 67 años».
El jurista Claudio Grossman se refirió a la decisión del Ministerio de Relaciones Exteriores, de no apoyar la presentación de su candidatura para integrar la Corte Internacional de Justicia (CIJ). Al respecto, dijo que la prioridad del Gobierno es «la elección del país en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas» e incentiva al Ejecutivo a que «incluya en sus prioridades» el patrocinio a otra candidatura ante la CIJ.
Cancillería emitió ayer un comunicado en el que indicaron que no presentaron la candidatura de Grossman. Esto, a propósito del cargo que dejó vacante el juez brasileño Antonio Cançado, quien falleció el pasado 29 de mayo. Grossman concitaba un apoyo transversal.
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En una declaración enviada a El Mercurio, el jurista explicó que la ministra de Relaciones Exteriores, Antonia Urrejola, le comunicó que no apoyarán la presentación de una candidatura nacional a la CIJ.
«La prioridad del Gobierno de Chile es la elección del país en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas. Es ciertamente al Gobierno al que le corresponde la conducción de la política exterior», dijo Grossman en la declaración.
«Hay que notar, además, que ha transcurrido un tiempo valioso e irrecuperable desde que se abrió la oportunidad de llevar una candidatura de Chile a la CIJ debido a la vacancia producida como resultado del lamentable fallecimiento del juez de Brasil, Antonio Cançado Trindade. Numerosos juristas y excancilleres señalaron a la Cancillería la importancia de una postulación nacional», agregó.
«Pasadas ya más de seis semanas, se han presentado dos candidaturas en otros países», agregó el jurista, aludiendo a los aspirantes de Argentina (Marcelo Kohen) y de Brasil (Leonardo Caldeira).
Asimismo, agradeció el «impresionante apoyo que existe en Chile sobre la importancia de la CIJ y la relevancia que tendría para el país que una chilena o chileno pudiera llegar en el futuro a ser juez del tribunal mundial del que hemos estado ausente por más de 67 años».
«Apoyaré con entusiasmo dichos esfuerzos e incentivo al Gobierno que considere esa posibilidad y la incluya en sus prioridades», sostuvo. En esa línea, dijo que «ofrezco toda mi cooperación en el esfuerzo de abrir oportunidades para un persona que pueda tener éxito».
Recordemos que Grossman fue uno de los agentes de Chile ante la CIJ en el marco de las demandas marítimas que enfrentó el país por parte de Perú y Bolivia.
Desde Cancillería, explicaron ayer que su decisión se debe a que «una elección a la CIJ implica una campaña de gran envergadura, que se debe trabajar de manera prioritaria y con mucha anticipación».
«La administración anterior, pese a conocer esta información, no presentó al profesor Grossman ni a ningún otro candidato a la CIJ para el período 2024-2033, como tampoco se planteó por algún grupo de interés o Grupo Nacional de la Corte Permanente de Arbitraje la posibilidad de hacerlo ante esta administración», añadieron.
«El escenario actual de intercambio de apoyos -mecanismo a través del cual un país respalda la candidatura de un tercero a cambio del voto en una elección de su propio interés- es particularmente preocupante para la candidatura de Chile al Consejo de Derechos Humanos», comentaron.
Esa candidatura «fue presentada en 2021 por la administración del Presidente Sebastián Piñera y sobre la cual el apoyo que le ha prestado el actual Gobierno debe entenderse como una política de Estado y una prioridad de la agenda de política exterior», apuntaron.
«En el escenario descrito, considerando que una elección tan importante requiere planificación anticipada, disposición de votos, recursos presupuestarios y estrategia de campaña, el Ministerio de Relaciones Exteriores lamentablemente no está en condiciones de postular esta candidatura para el proceso eleccionario en curso», complementaron.
La decisión de Cancillería generó críticas transversales. Por ejemplo, el excanciller Heraldo Muñoz (PPD) dijo a La Tercera que “se ha perdido una gran oportunidad de tener un juez chileno en la Corte, después de 67 años”.
“En las elecciones donde compiten personas, y no países, la trayectoria y el respeto profesional son factores clave, y en eso el jurista Claudio Grossman era un candidato comparativamente muy potente”, agregó el exministro.
En tanto, el excanciller del segundo Gobierno de Piñera, Teodoro Ribera, indicó que la candidatura de Grossman «para el cargo en la CIJ está avalada sin duda desde el punto de vista profesional”.
El senador e integrante de la comisión de RR.EE. de la Cámara Alta, Francisco Chahuán, comentó que la decisión del Ejecutivo es «deplorable e incorrecta» y que “demuestra la falta de oficio de la Cancillería”.
