PAÍS
La dirigenta gremial sostiene que el acto fue concebido para confrontar al Presidente Boric, por lo que ratificó el carácter de «encerrona» que habría tenido al acto inaugural del encuentro nacional de las pymes, máxime si se considera la coordinación para cantar el himno de Carabineros y el «acarreo» de asistentes en buses. Figueroa cuestionó a Cumsille ya que “se ubicó en el sitio donde siempre ha estado, que es estar ligado a la política contingente para relevar a un determinado sector político y no al comercio detallista, que es muy precario», al tiempo que deslizó críticas a la avanzada presidencial debido a la falta de medidas de seguridad en el ingreso al Círculo Español, lugar donde se desarrolló la cita.
Una puesta en escena cuidadosamente montada, con un diseño y una coordinación que dan cuenta de un ánimo claro por incomodar al Presidente Gabriel Boric. Así define Gianina Figueroa, presidenta de la Unión Nacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Unapyme), el acto organizado para inaugurar el vigésimo primer Encuentro Nacional de la Pequeña Empresa (Enape), un evento organizado por la Conferencia Nacional de la Micro y Mediana Empresa (Conapyme) que encabeza Rafael Cumsille, el sempiterno dirigente del comercio detallista que fue duramente cuestionado por su rol en la “encerrona” que sufrió el Mandatario.
La dirigente afirma que no le extraña que Cumsille continúe distorsionando el rol de dirigente gremial, toda vez que, a su juicio, siempre ha utilizado el rol para participar en el debate político más allá de lo que toca al ámbito pyme. “En el ocaso de su vida desvirtuó su rol, y se ubicó en el sitio donde siempre ha estado, que es estar ligado a la política contingente para relevar a un determinado sector político y no al comercio detallista, que es muy precario. Fue obvio que su objetivo fue incomodar y permitir las faltas de respeto. Y la gente fue muy azuzada por el tema de la pregunta que hizo sobre qué prefería, si una nueva Constitución o la lucha contra la delincuencia, lo que me pareció absurdo porque una cosa no es incompatible con la otra”, sostiene Figueroa, para quien fue demasiado obvia la defensa de Cumsille -hombre muy identificado con el régimen de Augusto Pinochet- del orden institucional consagrado en la carta fundamental vigente.
“En total eran unas 250 personas, calculo yo. Había tres o cuatro personas que gritaban en medio, siempre vociferando, hasta que el Presidente les pidió respeto, y ante eso (Cumsille) guardó silencio”, añadió la timonel de Unapyme respecto del polémico encuentro desarrollado en el Círculo Español.
“Fue un diseño hecho para confrontar e incomodar al Presidente”, señaló Figueroa sin atisbo de duda. Por de pronto, el discurso de apertura, que corrió por cuenta del propio Cumsille, fue una peroración “tan extensa como poco profunda en los temas que nos importan a los pymes. Tampoco refirió a la economía y nada dijo sobre sobre los desafíos del sector. Eran puras anécdotas dichas sólo para incomodar a las autoridades presentes. Por ejemplo, recordó los consejos que le dio a la Presidenta Michelle Bachelet de no hacerle caso a los ‘sacristanes’, y eso incomodó al tiro al ministro de Economía (Nicolás Grau) y al presidente de la Cámara de Diputados y Diputadas (Raúl Soto). Luego llamó al general director de Carabineros (Ricardo Yáñez) y le hace un homenaje… Todo en un tono provocador. Y luego vino lo del himno”, agregó.
Figueroa sostuvo que le llamó la atención el hecho de que la mayoría de los presentes tuvieran hojas impresas con el himno de Carabineros. Hojas que estaban sin doblar, lo que sugiere que fueron proporcionadas a los presentes pocos minutos antes. “Se nota que fue organizado. Tenían el himno impreso. Nosotros no estamos con el ánimo de confrontar a Carabineros, aunque creemos que debemos iniciar un proceso de reforma muy profunda para mejorar la seguridad. Pero de ahí a entregar la medalla Diego Portales o ponerse a recordar a Carlos Ibáñez del Campo nos parece una exageración. Ni hablar de la pregunta que hizo después a la fanaticada, que -ojo- llegó en buses al evento. La gente fue acarreada con financiamiento público,”, aseguró la presidenta de Unapyme.
Asimismo, la dirigente gremial expresó sus reparos a la seguridad de la avanzada presidencial. “Lo primero que nos llamó la atención fue que al llegar nadie, pero nadie, nos pidió la identificación, y eso que había gente de la avanzada presidencial ahí. Cualquier persona podía entrar. Eso nos llamó la atención apenas llegamos”, señaló Figueroa, quien aclaró que llegó al encuentro por invitación de Juan Araya, presidente de la Confederación Nacional de Dueños de Camiones (CNDC). “Nos pareció bueno asistir a este encuentro que lleva 20 años haciéndose, y creímos necesario asistir porque necesitamos instancias de diálogo para avanzar en acuerdos que ayuden al sector”. Lamentablemente, poco de eso quedó, a juicio de la dirigenta de Unapyme.
“Le dije (a Rafael Cumsille) que no correspondía poner en esta situación al Presidente y a nosotros. Con Germán Dastres (primer vicepresidente de Conapyme) y Juan Araya (segundo vicepresidente) analizamos el tema y le pedimos a este último que expresara nuestro malestar, cosa que hizo después en la tarde cuando ya quedaba muy poca gente. Nosotros no queremos cortar el diálogo con ningún gobierno”, aseveró enseguida.
“Conapyme sufre una crisis profunda, una incapacidad de adaptarse a los tiempos y de desviarse de su tema político-partidista a un tema más gremial. Ojalá Conapyme pueda ser un puente de diálogo con los gobiernos de turno en la búsqueda de un modelo de desarrollo distinto que dé más valor al mundo pyme. El discurso de Germán Dastres fue en esas línea”, señaló Figueroa.
