Opinión
Sorprende mucho que se haga eco de declaraciones falsas, como que el 83% de los países de la OCDE tiene solidaridad contributiva, siendo que esta reforma haría que Chile sí pase a ser una anomalía, al tener solidaridad vía impuestos generales y contribuciones. Otra cosa que extraña, es la de llamar a las comisiones de intermediación comisiones fantasma, término acuñado por los impulsores de los cambios masivos de fondos de pensiones que perjudicaron a millones de trabajadores.
No hay duda de las capacidades técnicas del ministro de Hacienda, Mario Marcel. Rodeado de una coalición que hizo lo imposible por reducir las pensiones de los chilenos a través de la aprobación continua de los retiros de fondos, él, como presidente del Banco Central, se opuso de manera estoica a estas propuestas, señalando que –bajo su percepción– los fondos de pensiones, sin importar el tipo de sistema, debían de ser utilizados para pagar pensiones.
Cabe recordar que, estando en el Consejo del Banco Central en 2017, se realizó un estudio sobre los impactos de la cotización adicional al sistema de pensiones. Los resultados de este estudio fueron contundentes. Cualquier cotización adicional iba a reducir el empleo formal, más aún si se añadían componentes de reparto; lo mismo sucedía para los salarios líquidos. Luego, los efectos sobre el PIB de añadir elementos de reparto se señalaban muy negativos y, además, era el componente que menos aumentaba las pensiones.
Por eso asombra tanto la reforma previsional que presenta el Gobierno. Esto, dado que los estudios “técnicos” que presenta la propuesta de reforma de pensiones tienen resultados, al menos, extraños. Debido a que, de acuerdo a estos, estaríamos frente a una reforma perfecta para la economía: aumentaría los incentivos a cotizar e incluso se mantendrían los salarios debido a que la cotización sería de parte del empleador.
Sorprende mucho que se haga eco de declaraciones falsas, como que el 83% de los países de la OCDE tiene solidaridad contributiva, siendo que esta reforma haría que Chile sí pase a ser una anomalía, al tener solidaridad vía impuestos generales y contribuciones. Otra cosa que extraña, es la de llamar a las comisiones de intermediación comisiones fantasma, término acuñado por los impulsores de los cambios masivos de fondos de pensiones que perjudicaron a millones de trabajadores.
¿Qué ha pasado? O estos estudios realizados por el Gobierno son técnicamente superiores a la investigación previa sobre el tema, llegando a conclusiones completamente opuestas, o estamos nuevamente desinformando sobre el sistema previsional.
