El editorial del lunes en El Mercurio hizo partir optimistas a los ministros en la mañana, cuando iban camino a la Comisión de Seguridad del Senado a presentar las indicaciones para la Ley Naín-Retamal. Pero el escenario comenzó a complicarse al ver que el presidente de dicha comisión, Felipe Kast, quería salir rápidamente del asunto y discutir en un día todas las indicaciones. Los representantes del Ejecutivo explicaron su indicación clave y, sin mediar mucho análisis, los tres integrantes de la derecha votaron en contra y quedó rechazada. Este martes, el Gobierno insistirá con tal indicación en la Sala, criticará a la derecha por las leyes que aprobó a última hora el lunes y, a las 9:30 horas, el Presidente Gabriel Boric firmará, en el Patio de Las Camelias de La Moneda, el Compromiso Transversal por la Seguridad junto a autoridades regionales y comunales de todo el país.
La frase de la ministra del Interior, Carolina Tohá, retumbó en la sala de la Comisión de Seguridad del Senado: “Presidente, los ministros presentes nos vamos a retirar. Creemos que lo que vinimos a alegar a esta comisión ha sido rechazado de cuajo”. Había fracasado la cuidada estrategia elaborada por el ministro de Justicia, Luis Cordero, de unificar la ampliación del estatuto del uso de la fuerza en el Código de Justicia Militar, una indicación que pretendía tranquilizar los ánimos en la coalición de gobierno, especialmente en el Frente Amplio, y a aquellos especialistas que habían advertido que podía ser una legislación que fomentara el “gatillo fácil”.
No fue necesario que los ministros se pararan y salieran de la sala a conversar la estrategia o se pasaran un papel para consultarlo, los tres entendieron que era lo único que quedaba hacer: pararse e irse. Bastaron unas miradas entre los ministros y breves comentarios al oído.
Desde temprano existieron indicios de que el presidente de la Comisión de Seguridad, Felipe Kast (Evópoli), quería anotarse un punto político mostrando a la derecha como pro seguridad, y al Gobierno como dificultando esa agenda.
En el Ejecutivo señalan que la máxima demostración de que la derecha quiere hacer un punto político con esta tramitación es que, a última hora del lunes, la mencionada comisión aprobó con los tres votos de la derecha acotar “el delito de apremios ilegítimos”, junto con aprobar “la exención de responsabilidad penal del mando”. El oficialismo espera utilizar estas dos leyes para argumentar la ausencia de preocupación de la derecha por el tema de los derechos humanos, algo sobre lo cual el Gobierno y la bancada oficialista han dicho que no están dispuestos a transar.
El presidente de la Comisión de Seguridad, en tanto, explicó la salida del Ejecutivo al fin de la tarde señalando: “Nosotros, en legítimo derecho de nuestras facultades legislativas, votamos para proteger a Carabineros, para que nunca más sientan que cuando utilizan su arma de fuego son perseguidos, son imputados, dados de baja. El Gobierno, en vez de acompañarlos, se ha levantado de la mesa y se ha retirado del proceso legislativo”, sostuvo Kast.
En La Moneda señalan que la ministra Carolina Tohá, junto a la titular subrogante de la Secretaría General de la Presidencia, Macarena Lobos, y el ministro de Justicia, Luis Cordero, no estaban preparados para el rechazo de los tres parlamentarios de derecha sin escuchar argumentos. “Hasta el editorial de El Mercurio del día lunes en la mañana avalaba la estrategia de unificar la aplicación del estatuto del uso de la fuerza en el Código de Justicia Militar. El fin de semana todos los especialistas en la prensa insistieron en estos puntos e, incluso, dos de los tres especialistas que citó el sábado el propio Felipe Kast a exponer al Senado, apoyaron lo que había en estas indicaciones”, apunta un abogado del Gobierno que estuvo en la sesión de la comisión.
El sábado se habían presentado en el Senado el exsenador Felipe Harboe, el ministro de la Corte Suprema Jean Pierre Matus y el académico Enrique Aldunate. Los dos primeros apoyaron la orientación que había planteado el Ejecutivo y eso fue visto en La Moneda como una buena señal para el lunes.
La estrategia elaborada por el ministro Cordero señalaba que había que unificar la aplicación del estatuto del uso de la fuerza en el Código de Justicia Militar, que regula tres hipótesis de uso de arma de fuego: caso de legítima defensa y protección de tercero; el caso de huida; y el caso de incumplimiento de una orden.
Tras abandonar la Comisión de Seguridad, los ministros se dirigieron a La Moneda, donde se decidió insistir con las indicaciones en la Sala. Por su parte, tarde en la noche de ayer, Presidencia envió a la prensa la pauta para este martes del Mandatario: “Presidente de la República, Gabriel Boric Font, junto a la ministra del Interior, Carolina Tohá, encabezan ceremonia de firma del Compromiso Transversal por la Seguridad junto a autoridades regionales y comunales de todo el país”.