Ante la competencia de medios digitales, Televisa abandona mercados de revistas impresas en América Latina, que le impulsaron como uno de los gigantes en la edición de contenidos en español en el mundo.
Es, desde hace décadas, uno de los mayores editores de revistas en español del mundo. La oferta de sus marcas incluye entretenimiento, reportajes periodísticos o artículos de ciencia.
Pero ahora Editorial Televisa vive un período difícil. En las últimas semanas abandonó dos de sus mercados más productivos, Colombia y Chile.
Y años antes había cerrado sus filiales en Puerto Rico, Perú y Argentina, donde sus ediciones impresas tenían más de 26 años.
Según analistas, con este aparente repliegue la televisora pretende contener los problemas financieros que padece desde hace varios años.
Pero también es una estrategia para enfrentar la competencia que representa el creciente consumo de contenidos por internet.
“En estas nuevas condiciones Televisa ya no genera utilidades en sus negocios de medios escritos” explica a BBC Mundo el analista Miguel Pineda Ortega.
“Por eso trata de desprenderse de ese tipo de medios para equilibrar sus finanzas, que en los últimos cinco años vienen cada vez más abajo”.
En el último trimestre de 2018 Televisa reportó a la Bolsa Mexicana de Valores una utilidad neta –la que se obtiene tras descontar los gastos e inversiones- de 56,5 millones de pesos, unos US$3 millones.
Esto representa una caída de 83% con respecto a las ganancias en el mismo período de 2017.
BBC Mundo solicitó a Televisa una entrevista sobre la cancelación de sus ediciones impresas en Latinoamérica, pero no hubo respuesta.
Los primeros pasos de la televisora en el mercado de medios impresos fue a finales de los 80, cuando fundó el diario deportivo The National editado en Estados Unidos.
El proyecto se canceló en poco tiempo. Según algunos medios mexicanos, la televisora perdió US$100 millones en el negocio.
En 1992 realizó un nuevo intento al comprar la mayoría de las acciones de Editorial América, un consorcio de medios impresos creado en 1960 que editaba algunas de las revistas más cotizadas de América Latina como Vanidades y Cosmopolitan en español.
En pocos años Editorial Televisa, el nombre del nuevo corporativo, amplió a 182 su cartera de ediciones, distribuidas en más de 100.000 sitios de venta en México y Latinoamérica.
Datos de la compañía señalan que en sus mejores años de la empresa el tiraje de revistas superó los 48 millones de ejemplares.
En los años siguientes estableció oficinas en Perú, Colombia, Chile y Argentina, donde realizaba la impresión de ediciones locales. En estos países la presencia de Televisa era de casi tres décadas.
Televisa también adquirió licencias para editar algunas de las marcas de revistas más populares del continente, como National Geographic, Marie Claire, Disney o Marvel entre otras.
También cuenta con marcas propias como TV y Novelas, Caras o Cocina Fácil, entre otras.
En algunos lugares la presencia del corporativo fue más que un buen negocio.
Es el caso de Chile donde la filial de Televisa contaba con los derechos para imprimir la revista de Condorito, uno de los personajes icónicos de ese país.
Al cerrar la edición chilena no está claro quién se encargará, en adelante, de mantener en los kioscos de revistas las aventuras del ave y sus amigos.
En los últimos años el número de suscripciones y ventas directas bajó considerablemente en América Latina, según medios locales como La República de Colombia.
También se registró una disminución en la compra de publicidad, sumado al creciente aumento en el precio del papel y otros elementos para la impresión de las revistas.
Pero al mismo tiempo la inversión publicitaria en medios digitales se incrementó.
Televisa, dicen especialistas, no ha logrado adaptarse por completo al nuevo modelo de consumo de contenidos a pesar de algunas decisiones corporativas de los últimos años.
Una de ellas fue crear Televisa Interactive Media, una división corporativa para crear contenidos específicos para plataformas móviles, como teléfonos celulares o tabletas.
También aumentó su participación en el mercado de televisión de paga en México, un sector que en los últimos años registró un aumento significativo en el número de suscriptores.
Pero en el entorno de ediciones impresas el escenario es distinto. Hasta ahora, según medios especializados y analistas, Televisa pretende mantener su filial mexicana, la más importante del corporativo.
La idea es enviar las ediciones impresas en México hacia los mercados donde cerró sucursales.
“Es una decisión política” dice el especialista Pineda Ortega. “Tener aquí medios impresos le da más fuerza en las negociaciones con el nuevo gobierno, que cambió la estrategia de publicidad”.
No es el caso del resto de Latinoamérica, y en especial los países del Cono Sur donde Televisa intensificó su repliegue.
“Para la empresa el mercado ya no es relevante” dice el analista. “No le representa pérdida de imagen porque ya lo perdió todo en cuanto a los medios en papel”.
“Eran negocios que le dejaban pérdidas. Televisa tiene muy poco que perder en América Latina”.