El pasado lunes 3 de junio vencía el plazo para que el rector apelara a la sentencia del Primer Tribunal Electoral de Santiago, quienes declararon nula la reelección debido a que académicos por hora no pudieron sufragar.
Ayer se cumplía el plazo para que la Universidad de Santiago apelara a la sentencia del Primer Tribunal Electoral de Santiago, quienes declararon nula la elección del rector Juan Manuel Zolezzi tras acoger un recurso debido a que académicos por hora no pudieron sufragar.
El tribunal justificó la nulidad de la votación debido a que cuando se realizó, en julio de 2018, se excluyó del padrón electoral a unos 1.800 profesores por hora, impidiéndoles el derecho a sufragar, «constituyendo una irregularidad que vicia el acto eleccionario».
De hecho, desde la Asociación de Académicos de la casa de estudios (Asoacad) habían pedido a Zolezzi que no apelara, asumiendo la sentencia.
«Sin democracia nuestra universidad no es posible que aspire ni siquiera a una acreditación mínima, porque una condición es que una comunidad universitaria sea participativa. Si eso se restringe no sabemos de que estamos hablando y como asociación académica hemos sido tajantes con eso frente al rector», dijo José Enrique Acosta, director de la Asociación.
Sin embargo, Zolezzi hizo oídos sordos y, cuando el reloj marcaba cerca de las 9 de la noche del lunes 3 de junio, comunicó que la Usach «ha apelado a la sentencia de primera instancia del Tribunal Electoral Regional», como señala el escueto comunicado enviado.
El rector ya había dicho que se mantendría en el cargo y que la universidad apelará al mismo.