Los dos países, muy críticos con los esfuerzos internacionales de protección climática, dicen buscar el «desarrollo económico responsable» en la región.
Estados Unidos y Brasil, los dos principales críticos del acuerdo climático de París, dijeron este viernes (13.09.2019) que promoverán el desarrollo del sector privado en la Amazonía, donde el recrudecimiento de la deforestación y los incendios generó recientemente alarma mundial.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, y su par brasileño, Ernesto Araujo, prometieron en Washington poner en marcha la cooperación estratégica a la que se comprometieron sus presidentes de derecha, Donald Trump y Jair Bolsonaro.
«Este mes, equipos brasileños y estadounidenses avanzarán en el compromiso que nuestros presidentes hicieron en marzo para un fondo de inversión de impacto de 100 millones de dólares por 11 años para la conservación de la biodiversidad amazónica», anunció Pompeo. «Ese proyecto será liderado por el sector privado», agregó.
Funcionarios estadounidenses señalaron que el fondo busca apoyar inversiones en sectores de alto riesgo y de difícil acceso de la Amazonía para estimular negocios en línea con la conservación de los bosques y la biodiversidad. Ambos países buscan el «desarrollo económico responsable» en la región, afirmaron.
«Queremos estar juntos en el esfuerzo por crear desarrollo para la región amazónica, el cual estamos convencidos de que es la única forma de proteger realmente la selva», dijo Araujo. Y agregó: «Necesitamos iniciativas, nuevas iniciativas productivas, que generen empleos, que generen ingresos para las personas en la Amazonia, y ahí es donde nuestra asociación con Estados Unidos será muy importante para nosotros».
En rueda de prensa más tarde, el canciller brasileño dijo a periodistas que Brasil espera el respaldo del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para estas iniciativas.