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Los resultados del centro de estudios de la Universidad Católica indican que las concentraciones de compuestos orgánicos volátiles que llegaron a la península de Quintero «fueron lo suficientemente bajas para no generar un daño a la salud de las personas». La conclusión del Dictuc contradice lo afirmado políticamente por la ministra Carolina Schmidt, quien desde el inicio ha responsabilizado directamente a la Empresa Nacional del Petróleo de los episodios de nube tóxica.
Finalmente se conoció el resultado del informe que la Superintendencia del Medio Ambiente solicitó al Dictuc de la Universidad Católica respecto a los episodios de contaminación ocurridos en la localidad de Quintero y Puchuncaví en agosto del año pasado y que terminó con una intoxicación masiva de más de 300 personas.
Los resultados del centro de estudios indican que las concentraciones de compuestos orgánicos volátiles (COVs) que llegaron a la península de Quintero «no superaron el umbral de olores de benceno de 1,5 ppmV [4780 μg/m3N]1, ni el resto de los contaminantes».
Esto quiere decir, de acuerdo al análisis, que «las concentraciones máximas modeladas de COVs fueron lo suficientemente bajas para no generar un daño a la salud de las personas, ni detección de olores desde el 20 al 26 de agosto de 2018″.
El estudio analizó la dispersión de las emisiones de 5 compuestos orgánicos volátiles; Benceno, Tolueno, Etilbenceno y Xileno (BTEX), más el Diclorometano, desde el separador API ( dispositivo diseñado para separar grandes cantidades de aceite suspendido y sólidos suspendidos provenientes de aguas residuales efluentes de refinerías de petróleo) de la zona de “Remodelación” del Terminal Marítimo Quintero de ENAP Refinerías S.A.
La conclusión del Dictuc contradice lo afirmado políticamente por la ministra Carolina Schmidt, quien desde el inicio ha responsabilizado directamente a la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) de los episodios de nube tóxica.
Cabe mencionar que ayer se conoció la decisión del Juzgado de Garantía de Talcahuano, que dictó las medidas cautelares para seis ejecutivos de la ENAP debido a su responsabilidad en los casos de emergencias ambientales generadas el 4 y 21 de agosto de 2018.
De acuerdo al Ministerio Público, los funcionarios serían responsables de la propagación de elementos contaminantes al medio ambiente, sabiendo del daño que podían provocar en la salud pública.
Las medidas fueron aceptadas por Enap, sin embargo señalaron que «todas las instancias de investigación judicial y administrativas realizadas hasta ahora han confirmado que no es posible atribuir responsabilidad a los trabajadores de la compañía por estos eventos”.
Desde la empresa aseguraron que “estos trabajadores, han permitido garantizar el suministro de combustible de Chile en momentos muy críticos por lo cual es muy doloroso para ellos y para ENAP que hoy día se les haya intentando presentar como personas peligrosas para la seguridad”.
Consulta el informe del Dictuc a continuación.
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