Esta nueva entrega del estudio elaborado por la Universidad de Chile junto al Colegio Médico, indica que los motivos por los que las personas no consultan incluyen que “esperan empeorar” antes de consultar (58 por ciento), seguido de la percepción de que consultar no es importante (27 por ciento).
Un nuevo informe del Monitoreo Nacional de Síntomas y Prácticas Covid-19 en Chile (MOVID-19), reveló que solo 34% de los casos sospechosos de coronavirus aseguró haber asistido a una consulta médica.
Esta nueva entrega del estudio elaborado por la Universidad de Chile junto al Colegio Médico, indica que los motivos por los que las personas no consultan incluyen que “esperan empeorar” antes de consultar (58 por ciento), seguido de la percepción de que consultar no es importante (27 por ciento).
En ese sentido, sostienen que estos dos motivos se vinculan a la percepción de que el riesgo de estos síntomas es reducido. Otros factores que aparecen son el costo de la consulta (7 por ciento) y el tiempo de espera para acceder a ella (5 por ciento).
Al respecto, la académica de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, Francisca Crispi advirtió que «estos resultados nos deben llamar la atención». Recalca que es necesario «mejorar la comunicación a la ciudadanía en términos de cuáles son los síntomas de caso sospechosos de manera que las personas consulten y se tome el examen precozmente, para poder hacer la trazabilidad de sus contactos estrechos».
También señalan que hay una disminución de 20 por ciento en las consultas desde la semana del 6 de abril hasta la semana del 20 de abril, lo que posteriormente aumenta hasta superar el 50 por ciento en la semana del 18 de mayo. Explican que este crecimiento se debe a que existe una mayor demanda por parte de usuarios de isapre, quienes cuentan con mayor acceso a consultas médicas que aquellos que están en Fonasa.
«El factor más relevante para no consultar es la previsión: los beneficiarios FONASA tienen más posibilidades de no consultar ante síntomas en comparación a los de ISAPRE, lo que evidencia desigualdades similares a las observadas al analizar los tiempos de espera y las cuarentenas».
Finalmente, Cristián Rebolledo de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, explica que «hay un problema con la percepción del riesgo. Todo cuadro respiratorio debiera ser considerado COVID-19 hasta que se demuestre lo contrario. No se trata de ser catastrófico, porque la situación ya es catastrófica y se debe transmitir la importancia de una consulta precoz».