La resolución de la Comisión para el Mercado Financiero señala que la conducta del economista y ex director de la concesionaria que controla al equipo de fútbol Colo Colo es de “extrema gravedad” dado que la ley castiga la venta de acciones estando en conocimiento de información privilegiada sobre los estados financieros.
Por infringir el deber de abstención establecido en el artículo 165 de la Ley N° 18.045 de Mercado de Valores, el Consejo de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) resolvió sancionar al ex director de Blanco y Negro S.A., Paul Fontaine, con una multa de 2.000 UF ($57.414.000).
De acuerdo a la Resolución N° 3.087, Paul Fontaine, en su calidad de director de Blanco y Negro S.A., vendió acciones de dicha sociedad estando en conocimiento de los estados financieros al 30 de junio del 2018, aprobados por el Directorio, y que a la fecha de las transacciones no eran de conocimiento público.
De esta manera, el sancionado infringió el deber de abstención, consistente en la prohibición de adquirir o enajenar, para sí o para terceros, directamente o a través de otras personas, los valores sobre los cuales posea información privilegiada, señala la CMF.
La resolución de la Comisión señala que la conducta del sancionado ha de estimarse de extrema gravedad, toda vez que afecta algunos de los bienes jurídicos más preponderantes y celosamente resguardados por la regulación, como son la transparencia y equidad en el mercado de valores, evitando que se realicen operaciones con asimetría de información.
De todos modos, la resolución desestimó la intención de hacer de uso de información privilegiada, “toda vez que el motivo de la transacción fue la consideración que las acciones ya no eran útiles a efectos de aumentar la posición en el Directorio, explicación que resultó consistente con los demás antecedentes del expediente”, explica el organismo.
Fontaine se convirtió en accionista y director de Blanco y Negro, la sociedad que controla al equipo de fútbol Colo Colo, ligado a Aníbal Mosa, y en marzo de 2019 renunció al directorio. Antes, era conocido por haber sido socio del empresario Rodrigo Danús –ligado a la farándula como dueño de la franquicia televisiva SQP–, en una empresa del sector energético. Después saltó a la política como asesor del entonces meteórico candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami, pero luego se incorporó en 2013 como asesor económico de Evelyn Matthei, candidata presidencial de la UDI. Paralelamente, el “empresario independiente”, como se autodefine, ha protagonizado varias polémicas en Twitter con mensajes de corte ultraliberal.