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Crédito: Aton
Este año, el presupuesto considera $20 mil millones para renovación de equipamiento y $60 mil millones para prestaciones y tratamientos que no son cubiertas por el Auge o Ley Ricarte Soto.
El Presidente Sebastián Piñera promulgó este miércoles la Ley Nacional del Cáncer Claudio Moraque establece un marco normativo para la planificación, desarrollo y ejecución de políticas públicas, destinadas a prevenir el aumento de la incidencia de la enfermedad.
Desde el Palacio de la Moneda y acompañado por los ministros de Salud, Enrique Paris, y de la Secretaría General de la Presidencia, Cristián Monckeberg, Piñera explicó que esta norma aborda la enfermedad desde la prevención, la detección precoz y la atención oportuna y está destinada a enfrentar la situación de 45 mil personas que anualmente
son diagnosticadas con algún tipo de cáncer en Chile.
El Presidente sostuvo que el cáncer «se va a transformar muy pronto en la primera causa de muerte en nuestro país». Incluso, aseguró que ya es la principal causa de fallecimientos en siete regiones. Cada año, 25 mil personas pierden la vida por esta enfermedad.
Además, esta iniciativa favorecerá a todas las personas diagnosticadas con esta enfermedad al asegurar tratamiento y protección laboral, entre otras medidas relevantes.
Además, la norma crea un fondo de financiamiento constituyendo un paso relevante en los ámbitos de la promoción de la salud, fortaleciendo y creando conciencia sobre la necesidad de una atención de calidad, oportuna y equitativa para los chilenos, que permita disminuir progresivamente la incidencia y mortalidad a causa de esta patología.
Este año, el presupuesto considera $20 mil millones para renovación de equipamiento y $60 mil millones para prestaciones y tratamientos que no son cubiertas por el Auge o Ley Ricarte Soto.
También contempla la creación del Registro Nacional del Cáncer, con información de pacientes que padecen esta enfermedad, además de la Comisión Nacional del Cáncer, cuyo objetivo será asesorar al Ministerio de Salud en la formulación de políticas, investigación científica, implementación de estrategias y prácticas de prevención, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y cuidados paliativos en lo relativo al cáncer.
Por otra parte, la ley contempla la implementación de normas para proteger el trabajo de las personas que padecen esta enfermedad. Es decir que cualquier persona que sea despedida que se declare como discriminatorio, se considerará grave si está basado en el padecimiento del cáncer.
