Con el lanzamiento de un libro virtual, María Luisa Portuondo, artista chilena que se ha especializado en la intervención de espacios públicos para desarrollar obras que rescata una memoria colectiva a través del intercambio con la audiencia, dará a conocer las peticiones que levantó de la ciudadanía durante el estallido social.
La iniciativa dio su puntapié inicial el 25 de octubre de 2019, cuando se desarrolló la marcha más multitudinaria -de la que se tiene registro hasta ahora- de lo que fue el estallido social más grande de la historia reciente del país y que, además, dejó al descubierto una serie de desigualdades experimentadas a diario por la sociedad chilena.
Fue así, como Portuondo logró recolectar 1809 demandas escritas a puño y letra por ciudadanos y ciudadanas entre las que se repetían el acceso a la salud, la educación, la vivienda y a condiciones de vida más dignas.
Gracias a este material, es que la artista, en colaboración con la editorial chilena Naranja Publicaciones, logró editar un libro que fue entregado el pasado 15 de Septiembre en La Moneda. Esta publicación, que hoy está siendo expuesta en el Museo de la Memoria, también será exhibida en Berlín para, posteriormente iniciar una segunda etapa de la iniciativa, donde recopilará “demandas de un estallido social que hoy es universal y que necesita ser registrado con el fin de resguardar su memoria”, asegura la artista.
Es así como Portuondo se propone, al igual como hizo con su última obra, denominada Secreto, hacer de este proyecto una pieza itinerante que viaje por distintos países archivando diversas demandas ciudadanas, para así poder recoger también similitudes y diferencias entre un país y otro. Y entonces, levantar la segunda edición: Demanda Pública, internacional la que, en esta ocasión, la artista espera entregarla a la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Para ella la respuesta de la ciudadanía con las casi 2.000 peticiones que buscan alcanzar un país más justo y equitativo para todos y todas, y el interés del Museo de la Memoria y de Kastanien en Berlín “son señales claras de la urgencia que siente la ciudadanía por ser escuchada, pero también de que las instituciones, no solo las nacionales, validen estas voces y se amplifique su alcance”, dijo.
Así mismo, la artista asegura que esta obra y su necesidad de hacer una segunda parte, “nace de la importancia que veo en registrar una memoria colectiva, que es fundamental para la conciencia de un nosotros”.
Actualmente, Portuondo se encuentra en Nueva York donde expondrá su obra más reciente, HABITAR, reminiscencias 2020, que fue creada durante la crisis sanitaria y que busca, a través de audios, dar cuenta y generar un registro histórico de lo que ha sido este periodo
Es artista visual y escénica, con estudio teatro en la Universidad Finis Terrae y Master en Artes en la Universidad de Chile. El foco de su trabajo está centrado en la ocupación de espacios urbanos y del apoyo y participación.
En un mundo hiperconectado y, muchas veces solitario e individualista, la creación de una memoria colectiva permite tener un registro muy personal de cómo esta crisis ha golpeado a distintas personas y con qué intensidad.
Su trabajo ha sido expuesto, principalmente, en instituciones como: Museo de Moscú, Quartier Museum (Viena), Museo de Arte contemporáneo (Chile), KIOSKO (Bolivia), Lugar a Dudas(Colombia), REJA (Albania), Instituto Cervantes (Pekín), URBANCROSS (Shanghai), entre otros.