Ante la posición inflexible del oficialismo, la oposición estuvo dispuesta a ceder y reducir el número de escaños para los pueblos originarios que originalmente eran 24. A medida que avanzaba la hora y la Comisión Mixta seguía entrampada en el debate del número de escaños, el senador Pedro Araya propuso reducir los cupos a 20. Pero no hubo caso, la ministra de Desarrollo Social, Karla Rubilar, y los representantes de la derecha no cedieron ni un centímetro y se mantuvieron firmes en torno a los 15 escaños. Vino entonces un nuevo ofrecimiento del diputado René Saffirio, quien redujo a 18 el guarismo, pero bajo una modalidad híbrida: nueve serían elegidos dentro de los 155 cupos de la Convención Constitucional y los otros nueve serían escaños supranumerarios. Sin embargo y, pese a quedar solo con un diferencia de tres escaños, La Moneda no cedió, postergando nuevamente una decisión que marcará la participación, o no, de los pueblos originarios en la redacción de la nueva Constitución.
Sin avances terminó ayer la Comisión Mixta convocada para despachar el proyecto de escaños reservados para pueblos originarios que conformarán la nómina para los candidatos a la Convención Constitucional. Pese a las extensas discusiones, por la noche no se llegó a un consenso entre las posturas del oficialismo y la oposición. Por lo que no quedó más que postergar el debate para el sábado 6 y el lunes 8 de diciembre.
La oposición fue allanándose, en todo caso, a disminuir el número de escaños para los pueblos originarios, manteniendo su posición de 24 en un comienzo, pero a medida que avanzaba la hora estuvo dispuesta a bajar el guarismo. Es así como el senador Pedro Araya se manifestó dispuesto a reducir el número, proponiendo 20. Pero no hubo caso, la ministra de Desarrollo Social, Karla Rubilar, y los representantes de la derecha no cedieron ni un centímetro y se mantuvieron firmes en torno a los 15 escaños.
Una nueva propuesta provino entonces de parte del diputado René Saffirio, quien redujo el número a 18, pero bajo una modalidad híbrida: nueve serían elegidos dentro de los 155 convencionales y los otros nueve serían escaños supranumerarios. Sin embargo y, pese a quedar solo con un diferencia de tres escaños, el oficialismo no cedió.
En segundo orden, el otro aspecto que concentró gran parte del debate fue la confección del padrón indígena. que estaría a cargo del Servel sobre la base de los antecedentes disponibles en el Estado, tales como la solicitud de calidad indígena en la Conadi; la nómina de apellidos indígenas del mismo organismo; la nómina de apellidos indígenas de postulantes a becas indígenas desde el año 1933; el registro de socios de comunidades y asociaciones indígenas jurídicas de la Conadi, ente otras.
Este padrón no sería vinculante con el número de escaños a elegir. Y podrían votar por los convencionales de escaños indígenas los ciudadanos y las ciudadanas que aparezcan en el padrón que confeccionará el Servel. Pero también lo podrán hacer quienes, no apareciendo en dicho padrón, acrediten su calidad de indígena mediante un certificado de la Conadi o mediante un declaración jurada otorgada ante el Servel, para lo cual este deberá habilitar un sitio tecnológico con tal finalidad. Para aquellas personas que no contaran con los documentos de la Conadi, podrán firmar una declaración jurada que el Servel dispondrá en cada mesa receptora de sufragios, donde manifieste su calidad de indígena.
Los legisladores están conscientes de que están a contra reloj en un tema que lleva más de un año abierto, por lo que la discusión del sábado y y lunes será crucial para saber si efectivamente los pueblos originarios podrán tener participación en la redacción de una nueva Carta Fundamental.
Ante el estancamiento de la iniciativa en el Congreso, en la oposición intentaron tomar riendas en el asunto y los jefes de comités se reunieron el miércoles a la hora de almuerzo, vía telemática y presencial, acordando que la presidenta del Senado, Adriana Muñoz, notificara al ministro de la Segpres, Cristián Monckeberg, de la necesidad de flexibilizar la postura en el tema de los escaños reservados o, de lo contrario, bloquearían los proyectos de La Moneda de ahora en adelante.
Luego de la reunión, la mesa del Senado y las bancadas de la oposición emitieron una declaración en la que advierten que “nos parece que la falta de un acuerdo amplio en esta materia pone en riesgo que la Nueva Constitución cuente con la legitimidad que le otorgaría considerar las opiniones de todos los sectores, particularmente de aquellos que han sufrido una marginación permanente en nuestra historia”.
Por eso, formularon “un urgente y enérgico llamado con altura de miras y la máxima generosidad” para sacar adelante esta reforma.
De cara a este debate, el senador Francisco Huenchumilla (DC) hizo también un urgente llamado al Gobierno y Chile Vamos. “Creo que es necesario que todos dimensionen que una Convención sin la participación de los pueblos originarios podría derivar en una grave situación, que le restaría credibilidad a esta Convención, y que podría ser cuestionada en su legitimidad (…). Creo que sería un grave error histórico que pudiera fracasar esta posibilidad”, planteó el legislador.