Desde Bruselas, capital de Bélgica, se afianza la idea de calidad del gasto, eficiencia y sostenibilidad de las iniciativas, todo en un marco de colaboración público-privada y un entorno amigable con los negocios.
Modernización de la administración pública, digitalización de las pymes, movilidad urbana, autonomía energética y la economía sostenible, son algunos de los desafíos de la Europa pospandemia.
Desde Bruselas, capital de Bélgica, se afianza la idea de calidad del gasto, eficiencia y sostenibilidad de las iniciativas, todo en un marco de colaboración público-privada y un entorno amigable con los negocios, según consigna un reportaje de The Conversation.
Es así como los proyectos de inversión en educación, en redes de hospitales, universidades o administraciones públicas son elegibles siempre que cumplan con criterios de edificación verde y de pie a la transformación de servicios.
En este escenario, el Brexit sigue siendo un proceso que genera dudas en lo que tiene que ver con intercambios en el continente. Es importante considerar que 43% proceden de países de la Unión Europea. Una mala resolución contraerá el PIB europeo en 0,5%.
En lo que respecta al turismo, habrá que acostumbrarse a los corredores turísticos. Al menos mientras se normaliza la vacuna. Esta situación beneficia a las Islas Baleares y Canarias.
El turismo de proximidad también va a crecer. Además va a ser necesario impulsar un turismo con soporte digital para apoyar la preventa, la información actualizada en móviles y los bonos culturales.
En síntesis, las vacunas están abriendo un horizonte para la recuperación económica.