“Puesta en esa disyuntiva, he decidido poner a disposición de ustedes, con mucha humildad, camaradas de la Junta Nacional, la nominación presidencial que me entregaron ayer por la tarde”, declaró la senadora, poniendo fin a su aventura presidencial. “No seré yo un obstáculo para que el Partido Demócrata Cristiano pueda conformar las alianzas que considere necesarias para los desafíos electorales que se avecinan” añadió [ACTUALIZADA]
Después de días y horas de incertidumbre, finalmente la senadora Ximena Rincón puso fin a su aventura presidencial y depuso su candidatura por la Democracia Cristiana, en una nueva intervención ante la Junta Nacional del partido.
La senadora cerró una historia que tuvo varios capítulos en estas últimas 24 horas. Primero partió emplazando a la presidenta del Senado Yasna Provoste a transparentar si tenía intenciones presidenciales; luego se declaró en estado de reflexión al someterse a la opinión de la Junta si se la ratificaba como candidata presidencial, y los resultados no fueron los esperados; y en cuestión de horas, en la madrugada se declaró “lista” para “competir en la primaria que sea”.
Sin embargo, los hechos se precipitaron y Rincón finalmente optó por dar un paso al costado. Pero lejos de retirarse derrotada, la parlamentaria se fue disparando hacia los socios de Unidad Constituyente, al revelar que “esta mañana me ha llamado la presidenta del partido, la estimada camarada Carmen Frei, para notificarme que nuestros socios, a través de Álvaro Elizalde y Heraldo Muñoz, le habían dicho que la única manera de ir a primarias con la DC era que yo depusiera mi candidatura presidencial”.
En efecto, el mensaje del PS y el PPD había sido claro: si Rincón era la candidata presidencial de la Falange, ambos partidos se inscribirían en la primaria del FA y el PC, donde competirán el alcalde comunista, Daniel Jadue, y el diputado, Gabriel Boric. Y en un día clave para las definiciones presidenciales de las oposiciones, el candidato del Partido Comunista, Daniel Jadue, le puso una dosis más de tensión al escenario de decisiones señalando que “no puedo imaginarme una primaria con Heraldo y con Ximena”.
Así las cosas, Rincón decidió abandonar la carrera, y así lo explicó a sus camaradas de la Junta. “Puesta en esa disyuntiva, he decidido poner a disposición de ustedes, con mucha humildad, camaradas de la Junta Nacional, la nominación presidencial que me entregaron ayer por la tarde”, declaró la senadora.
En ese contexto, añadió que “no seré yo un obstáculo para que el Partido Demócrata Cristiano pueda conformar las alianzas que considere necesarias para los desafíos electorales que se avecinan, y de los cuales depende el futuro y bienestar de chilenos y chilenas”.