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El senador llamó «al Presidente de la República y a las autoridades de gobierno para que acepten esta posibilidad, puesto que el Gobierno de Noruega ha dado un amplio respaldo al Centro Nansen para que pueda trabajar acá en Chile en este conflicto. Es fundamental el apoyo del Gobierno de Chile para que este trabajo comience».
El senador Francisco Huenchumilla (DC) valoró el llamado a diálogo que hicieron 9 rectores de universidades para resolver el conflicto en La Araucanía, para lo cual solicitaron la participación del Centro Nansen de Noruega, que horas más tarde respondió afirmativamente a dicho llamado.
Para Huenchumilla, es fundamental que el Gobierno de Chile acepte este llamado, «que en su momento cuando conversamos, en nuestra calidad de senadores, se mostró disponible para ello».
«Sabemos que en nuestra región tenemos un conflicto que ha traído una situación de violencia, y que ha traído un clima entre todas las organizaciones que conforman la sociedad regional de La Araucanía, de falta de confianza y de credibilidad», dijo el senador.
«Entonces -continuó-, si no es posible el diálogo entre nosotros, es fundamental que venga alguien de afuera, neutral, independiente, de prestigio, que le dé confianza a todos y que tenga además la experiencia de haber participado en otras situaciones conflictivas en otras partes del mundo, y que ayude a un proceso de diálogo».
«Valoro profundamente este llamado al diálogo que han hecho los rectos de las universidades (…) para que se pueda iniciar este proceso de diálogo», agregó.
Por último, el senador Huenchumilla llamó «al Presidente de la República y a las autoridades de gobierno para que acepten esta posibilidad, puesto que el Gobierno de Noruega ha dado un amplio respaldo al Centro Nansen para que pueda trabajar acá en Chile en este conflicto. Es fundamental el apoyo del Gobierno de Chile para que este trabajo comience».
Por otra parte, la presidenta del Senado, Yasna Provoste, reconoció en su cuenta de Twitter «el llamado de rectores y Obispo de la Araucanía a un diálogo amplio para construir un camino hacia la paz, sobre la base de gestos necesarios y reconocimientos indispensables que recojan la legítima causa del pueblo Mapuche. Es tiempo de paz y justicia».
