La defensa del Mandatario insistió en que la acusación contra el jefe de Estado «no reúne los requisitos legales ni constitucionales para su procedencia». Además, según el abogado Jorge Gálvez, en la segunda parte de su exposición ante la Cámara, la acción judicial «se basa en meras suposiciones, es vaga, tiene referencias genéricas a normas, afecta la garantía del debido proceso, y por lo tanto, afecta gravemente el principio de presunción de inocencia y no concurren en ella actos que afecten gravemente el honor de la nación».
El abogado representante de la defensa del Presidente Piñera, Jorge Gálvez expuso nuevamente ante la comisión parlamentaria en la Cámara de Diputados encargada de estudiar la acusación constitucional presentada contra el Mandatario, en jaque por su participación en la compraventa del proyecto minero Dominga en 2011. El abogado sostuvo que la acción «no respeta la presunción de inocencia».
Los descargos continuaron este sábado. Ayer la defensa del jefe de Estado calificó de «maniobra política mañosa y con claros fines electorales» el juicio político que intenta realizarse en su contra a raíz del escándalo de los Pandora Papers. E incluso apuntaron al gobierno anterior.
Hoy se reunió por segundo día la comisión para revisar el libelo y escuchar a la defensa del Presidente Piñera, desde donde insistieron en que la acusación no reúne los requisitos legales ni constitucionales para su procedencia.
El abogado Gálvez expresó que «la acusación constitucional se basa en meras suposiciones, es vaga, tiene referencias genéricas a normas y no respeta el principio de presunción de inocencia, por lo tanto, afecta gravemente el principio de presunción de inocencia».
«Fíjense, por ejemplo, como la página 26 párrafo final de la acusación dice: ‘es menester señalar que la adopción por parte de Chile del Acuerdo de Escazú, hace inviable la realización del proyecto minero Dominga’. Este párrafo creo que es una muestra muy gráfica de la manera en que está construida esta acusación constitucional», argumentó el jurista en su alegato.
Gálvez subrayó que la iniciativa de consagrar un área costera protegida en la zona de La Higuera no es que no fuese considerada por razones políticas, y descartó que el Mandatario «haya desarrollado alguna acción para impedir la protección ambiental».
En esta segunda jornada de presentación de defensa, el discurso de Gálvez se centró en un detallada descripción del proyecto que busca calificar la zona de La Higuera, en la Región de Coquimbo, como área marina protegida.
Cabe mencionar que la tercera cláusula del contrato de transacción de la minera, filtrada por la investigación periodística internacional, de manera paralela, está siendo investigada por el Ministerio Público para esclarecer la participación del Presidente Piñera.
En ese sentido Gálvez acentuó que «no es efectiva aquella acusación en términos que el Presidente haya realizado un acto destinado a intervenir en la zona para privarla de protección», y aseguró que «eso no conversa con los hechos».
El diputado Florcita Alarcón (independiente) sostuvo que la defensa del Mandatario fue «muy didáctica, pero absolutamente jurídica», y según dijo a Cooperativa, eso «no le servirá de nada porque la acusación constitucional es política».
La comisión revisora de la acusación constitucional contra el Presidente Piñera tendrá un plazo de seis días para estudiar los antecedentes y determinar una postura a través de un informe no vinculante.
Luego de eso, se dará inicio a la votación en la Cámara de Diputadas y Diputados. En ese momento, el imputado puede invocar la cuestión previa en caso que encuentre pertinente que la acusación no cumple con las condiciones reglamentarias.
En caso de ser acogida y aprobada la cuestión previa por los parlamentarios, la acusación constitucional podría no llegar a puerto.
Si deciden continuar con ella, la Cámara Baja deberá discutir el fondo del libelo, pero requerirá de 78 votos para ser aprobada. Si alcanza ese apoyo, la acusación deberá ser revisada por el Senado y el presidente quedará suspendido de sus funciones a la espera del resultado final.