Incluso se había ordenado su trasladado desde la Escuela de Carabineros, donde cumplía la medida cautelar, hasta el centro de detención Sucre. El exgeneral fue formalizado por malversación de caudales públicos, con $67 millones pesos a beneficio propio, según Fiscalía, en el caso de Gastos Reservados de Carabineros de Chile.
La Quinta Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago estimó arresto domiciliario total al exgeneral director de Carabineros, Bruno Villalobos, luego de que le revocó la medida cautelar de prisión preventiva por el caso Gastos Reservados. El retirado oficial está formalizado por malversación de caudales públicos y falsificación de instrumento público.
Durante el procesamiento legal, su defensa intentó en al menos tres oportunidades anular su prisión preventiva, sin tener éxito. Incluso se había ordenado su traslado desde la Escuela de Carabineros al centro de detención Sucre.
Sin embargo, su abogado, Ángel Valencia, aseguró que era falso que Villalobos se haya quedado con dinero, ya que no existe ningún antecedente en la carpeta de investigación del Ministerio Público que permita inculpar a su cliente. Y en su efecto, este lunes, lograron que el tribunal revocara la medida cautelar, dictaminando el arresto domiciliario total.
Valencia señaló a Rabio Bío Bio, que se trataban de meras especulaciones relacionadas a la connotación que se le dio a esas entregas de dinero. “Estamos seguros que en la medida que la investigación avance, se esclarecerán suficientemente los hechos y se determinará que este es una discusión meramente legal y que el general Villalobos no ha cometido delito alguno”, concluyó.
La investigación, en los últimos años, señaló que Villalobos se habría apropiado de $606 millones, entre 2015 y 2018, de los cuales $67 millones fueron a parar a beneficio propio. De acuerdo a Fiscalía, la entrega de los dineros de gastos reservados de Carabineros eran recibidos en sobres de papel, primero mensualmente y luego trimestralmente.
La sala es integrada por los ministros Fernando Carreño, Maritza Villadangos y Sergio Córdova.