La sanción se debe a situaciones irregulares que habrían ocurrido en las líneas 3 y 6. Desde Metro, aseguraron que han «cumplido permanentemente con la norma de vibraciones establecida en la Resolución de Calificación Ambiental». Esto, luego de las multas cursadas por incumplimiento en la mitigación del ruido y a las vibraciones generadas por el paso del tren subterráneo en la capital.
La Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) aplicó dos cuantiosas multas a Metro, las cuales ascienden sobre los mil millones de pesos. Esto, debido a diversas denuncias en las obras de construcción y el funcionamiento de las líneas 3 y 6.
Según consigna La Segunda, luego de dos procesos sancionatorios a la entidad, en donde se recibieron diversas denuncias de vecinos y alcaldes de las comunas afectadas, las multas se vieron materializadas y cursadas.
Una de estas denuncias que recibió la Superintendencia de Medio Ambiente se debe a ruidos molestos durante todo el día, debido a las obras de construcciones de las líneas del tren subterráneo. Estos sonidos fueron denunciados por «12 condominios, edificios, y los alcaldes de Providencia, San Miguel y La Reina desde 2013 a 2017», estableciéndose así una multa de 1.006 Unidades Tributarias Anuales, lo que equivale a $662 millones.
Los cargos de los que se le acusa a Metro, tienen que ver con el incumplimiento de medidas de mitigación de ruido en Plaza de Armas, problemas en los procesos constructivos y hallazgos arqueológicos no avisados.
Por otro lado, el segundo proceso sancionatorio es debido a las vibraciones generadas por el paso del metro en la línea 6, en donde se recibieron «ocho denuncias de condominio de edificios, de casas y vecinos de Providencia, Ñuñoa y Pedro Aguirre Cerda principalmente en 2018», lo que derivó en otra multa de 612 Unidades Tributarias Anuales, equivalente a $403 millones de pesos.
Desde Metro, aseguraron conocer las denuncias y plantean la posibilidad de responder a la Superintendencia de Medio Ambiente, asegurando que han «cumplido permanentemente con la norma de vibraciones establecida en la Resolución de Calificación Ambiental».
Cabe destacar que la entidad tiene un plazo de cinco días hábiles para reclamar ante la determinación ambiental y 15 para apelar ante el Tribunal Ambiental de Santiago.