La vocera de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, indicó que «es bueno» revisar este tipo de casos, porque «significa de alguna manera, y esto es una terrible desgracia, que empiece a haber una especie de industria delictiva donde personas ofrecen servicio delictivo de esta manera».
La vocera de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, abordó este martes la agresión contra una enfermera la enfermera Pola Álvarez (32), quien fue apuñalada por dos desconocidos en Las Condes en la mañana del domingo, luego de terminar su turno en la Clínica Cordillera.
Vivanco fue consultada sobre el caso y explicó que “el tema del sicariato, desde el punto de vista penal, tiene tres variantes (…) Primero, que muchas veces esto permite establecer autores del delito, que no son solamente autores materiales, sino autores intelectuales, aquellos que encargan el delito».
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«Por otra parte, el hacer uso de terceros para cometer un delito como este, que claramente, es un intento de asesinato. Estamos en presencia de una persona que recibió 11 puñaladas, puede figurar dentro del proceso penal como una agravante de la conducta», añadió.
«En tercer lugar, que evidentemente el punto de vista de la política criminal, estas situaciones es bueno revisarlas porque significa de alguna manera, y esto es una terrible desgracia, que empiece a haber una especie de industria delictiva donde personas ofrecen servicio delictivo de esta manera».
La ministra de la Corte Suprema puntualizó que «incluso se ha llegado a hablar hasta cuánto cobra este tipo de personas por cometer delitos, lo cual implica una diferencia del punto de vista del universo delictual y la forma en que este se está comportando”.
Recordemos que tras la agresión, la enfermera se dirigió a su lugar de trabajo, donde fue atendida e intervenida quirúrgicamente. Se encuentra fuera de riesgo vital.
En tanto, la fiscal de Flagrancia Oriente, Patricia Ibarra, descartó por el momento la hipótesis de robo, ya que a la víctima «no le falta ninguna especie».
Por su parte, el padre de la enfermera, Patricio Álvarez, apuntó que su hija fue víctima de hostigamientos por parte del personal de la clínica, luego de recibir nuevas atribuciones en el área de Urgencia.
“Había empujones en el casino, le daban vuelta la comida en su ropa, en operaciones de repente le sacaban la mascarilla y se la rompían, había un hostigamiento previo”, señaló.