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En conversación con El Mostrador en La Clave, el analista internacional Pablo Cabrera, se refirió al mensaje de la Unión Europea a Chile para que selle la modernización del Acuerdo de Asociación entre ambos países. En ese sentido, sostuvo que «ese es un punto que desafía bastante el accionar de la Cancillería. Efectivamente la UE hizo un comunicado conceptuoso y aprovechó de enfatizar la necesidad de llamar a la conclusión del Tratado de Modernización». «Hay que recordar de que Chile tiene un Acuerdo de Asociación de segunda generación con la UE desde hace mucho tiempo, el gobierno del expresidente Frei, Lagos, que junto con México fueron los dos países de la región que se asociaron institucionalmente con la UE, más allá de los temas cruciales», adicionó.
El analista internacional Pablo Cabrera, abordó en conversación con El Mostrador en La Clave, el mensaje enviado por el portavoz de Exteriores de la Unión Europea, Peter Stano, instando al Presidente Gabriel Boric a que selle la modernización del Acuerdo de Asociación bilateral.
A través de una declaración, se pide al Ejecutivo que modernice dicho acuerdo -que vincula a las partes desde 2003- que «allanará el camino para seguir profundizando nuestra amplia cooperación en ámbito como el multilateralismo, la democracia, los derechos humanos, la igualdad de género y la acción climática, el desarrollo inclusivo y sostenible y las nuevas oportunidades comerciales».
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Ante esto, Cabrera sostuvo que «ese es un punto que desafía bastante el accionar de la Cancillería. Efectivamente la Unión Europea hizo un comunicado conceptuoso sobre lo que había sucedido en Chile y aprovechó hacia el final del comunicado de enfatizar la necesidad de llamar a la conclusión del Tratado de Modernización de la UE».
«Hay que recordar de que Chile tiene un Acuerdo de Asociación de segunda generación con la UE, desde hace mucho tiempo el gobierno del expresidente Frei, Lagos, que junto con México fueron los dos países de la región que se asociaron institucionalmente con la UE, más allá de los temas cruciales», adicionó.
En la misma línea, apuntó que «la UE terminó un Acuerdo de Modernización en la relación con Chile y se acordó que se iba a pasar a los veintitantos parlamentos en Europa, que es el procedimiento que hay que hacer, que aquí se iba a aprobar y firmar».
«Cuanto llega el cambio de Gobierno, el Gobierno entiende, a través de lineamientos políticos que traía en cuanto a la implementación de su política económica, decidió y así lo dijo y lo expresó incluso en la visita del representante de política exterior de la UE a Chile, de que el acuerdo se iba a firmar de todos modos, pero se iba a esperar después del plebiscito», complementó.
A su parecer, «la Unión Europea está reclamando el cumplimiento de lo que se le había señalado a las autoridades oficialmente en cuanto a que después del plebiscito se abocarían a esta situación».
En cuanto a si hará eco el llamado en el Gobierno, Cabrera comentó que «esperemos que ese llamado, y el llamado del TPP-11 también, porque son dos tratados importantes que están con la línea de lo que ha sido la política comercial de Chile que le ha dado muchos frutos y réditos».
«Es cierto que cada Gobierno puede tener sus lineamientos más allá de lo que significan las políticas de Estado y sus énfasis; pero también, el plebiscito fue el referente para decir que el tratado de TPP-11 se iba a poner después del plebiscito en tabla para poder ser aprobado o reprobado por el Parlamento», añadió.
«Creo que son dos situaciones en un contexto de política comercial y de relacionamiento de Chile con el exterior y con América Latina que son de gran trascendencia y ojalá se cumpla eso, porque las confianzas no tienen que resentirse en cuanto a los anuncios y los acuerdos verbales que se hayan adoptado», sentenció.
