Colonia Dignidad es un antiguo asentamiento, ubicado a casi 400 kilómetros al sur de Santiago, creado por el suboficial nazi Paul Schäefer.
El Presidente Gabriel Boric y el canciller de Alemania, Olaf Scholz, coincidieron este domingo en construir un sitio de memoria en la antigua Colonia Dignidad, el enclave creado por el suboficial nazi Paul Schäefer que operó como centro de detención durante la dictadura militar chilena.
«Apoyamos completamente y agrademos la voluntad del Gobierno de Alemania de contribuir a la búsqueda de la verdad y hacer de la exColonia Dignidad un espacio de memoria. Es rol del Estado chileno, en toda su dimensión, el seguir luchando de manera incansable por toda la verdad y toda la justicia», dijo Boric en rueda de prensa conjunta con Scholz en La Moneda.
También te puede interesar:
Scholz, por su parte, indicó que su Gobierno «contribuirá» para crear un espacio de memoria en el antiguo asentamiento, ubicado a casi 400 kilómetros al sur de Santiago y uno de los episodios más controvertidos en las relaciones entre ambos países.
«Sabemos que se trata de un tema sensible, no es fácil encontrar una solución. Por eso, con toda la prudencia, queremos ofrecer nuestro apoyo y hacer lo que podamos hacer. Somos un socio en este contexto», añadió el canciller, quien inició este domingo su primera visita oficial a Chile.
En Colonia Dignidad, hoy rebautizada como Villa Baviera, Schäefer sometió a trabajos forzados, castigos, manipulación mental y, en algunos casos, abuso sexual a más de 300 personas, muchas de las cuales le siguieron a Chile desde Alemania.
El asentamiento, fundado en 1961 y que no fue desmantelado hasta 1991 por orden del presidente Patricio Aylwin (1990-1994), sirvió además de centro de torturas de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), la policía secreta del dictador Augusto Pinochet. Se estima que más de 100 personas opositoras al régimen fueron asesinadas en el recinto y siguen desaparecidas.
Organizaciones de derechos humanos y víctimas han acusado durante años tanto a la justicia chilena como a la alemana de no perseguir de manera suficiente los crímenes de cometidos y han criticado a los Gobiernos de ambos países de no llegar a un acuerdo para construir un espacio de memoria allí.
Schäfer, condenado en 2006 por abusos sexuales y fallecido en 2010, fue encerrado en una prisión chilena después de ser detenido en Argentina, hasta donde había escapado.
«La historia de Colonia Dignidad es terrible, desgarradora (…) y es terrible también, y no está de más recordarlo, el apoyo que tuvo por parte de un sector de la política chilena, algunos de los cuales están todavía en el escrutinio público», agregó Boric.