PAÍS
Crédito: Agencia Uno (referencia)
Algunos médicos del hospital devolvieron horas cuando se encontraban con permisos facultativos y no se realizaron los descuentos correspondientes a trabajadores que llegaban constantemente atrasados.
La Contraloría Regional de Los Lagos inició un sumario administrativo en el Hospital de Castro, Doctor Augusto Riffart, al encontrar irregularidades.
Entre ellas se encuentra la ausencia de cobro de multas por uso de personal en intervenciones licitadas realizadas en horario laboral, la devolución de horas por atenciones privadas hechas en horario laboral, la falta de descuentos a empleados que llegaron constantemente atrasados y horas pendientes de devolución en facultativos. Lo mismo se habría dado en el caso de los matrones.
Lo anterior se obtuvo al realizar una auditoría al hospital respecto a las “adquisiciones de prestaciones médicas, uso de pabellones, designaciones directivas y cumplimiento de la jornada laboral del personal médico”, indicó el informe de la Contraloría.
Entre las observaciones catalogadas como “altamente complejas” y que son cuestionadas por el órgano, se encuentran las horas pendientes de devolución. En detalle, se detectaron 793 horas y 37 minutos que no han sido devueltas por los funcionarios del hospital por las atenciones privadas al 31 de diciembre.
También se detectó que “las matronas, arsenaleros y segundos arsenaleros, no cuentan con un control de devolución de horas, por lo que, no se realizan por parte de ese centro asistencial, gestiones para su devolución”, indicó el informe.
“Se comprobó que dos profesionales médicos realizaron devolución de horas en días en que se encontraban haciendo uso de permisos facultativos”, a lo que se suma la “devolución de horas durante la jornada laboral”, agregó.
Además, se identificó que “tres médicos realizaron devolución de horas en condiciones que se encontraban ejerciendo su jornada laboral”, aseveró, y el personal que participa en intervenciones licitadas en la jornada laboral, lo que no se trataría de un caso aislado .
El hospital se defendió respecto a este punto, asegurando que “existieron errores involuntarios de registro de horario”, lo que se trataría de dos casos en que la Contraloría levantó los cuestionamientos, pero quedan 168 vigentes.
Otro punto cuestionado por el órgano es la “suspensión de pabellones reservados por compra servicios”, a lo que el recinto médico respondió asegurando que las suspensiones se debieron a “causas no atribuibles al prestador adjudicado”, a lo que agregaron documentos que respaldaron sus dichos, pero nuevamente solo sirvió para levantar los cuestionamientos de dos casos.
También se detectó que no se realizaron los descuentos correspondientes por atrasos porque no hay control.
Ante estos hechos, la Contraloría Regional de Los Lagos cobró multas de $3.101.508 y $23.613.798. A esto se suman los descuentos que se debieron realizar a los trabajadores que llegaron atrasados, lo que se deberá regularizar.
