El ministro de Hacienda, Mario Marcel, abordó la preocupación que ha mostrado el sector privado por la nueva Estrategia Nacional del Litio presentada por el Gobierno. Sostuvo que “ha habido una interpretación simplista, ya que son muchas las variedades posibles de asociaciones y participación público-privada, dependiendo de los proyectos que vayan surgiendo”. Hizo una distinción especial al señalar que el Presidente Gabriel Boric estipuló que “el control (estatal) se define para el contrato en el salar de Atacama”, por lo que, para futuros proyectos en esta industria minera, la participación del Estado irá dirigida, de aquí en adelante, solo “a aquellos que tengan significación estratégica”.
Tras el anuncio de la Estrategia Nacional del Litio, el sector privado no hizo esperar sus aprensiones respecto a la participación mayoritaria (51%) que tendrá el Estado dentro de las empresas que manejan la industria, donde la piedra de tope se enfocó en el tema “propiedad” o más bien quién iba tener la batuta. Para aclarar dudas, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, hizo dos distinciones sobre la nueva política minera: “El control se define para el contrato en el salar de Atacama” y, para proyectos futuros, la intervención estatal será solo “en aquellos que tengan significación estratégica”.
En conversación con TVN, el jefe de la billetera fiscal explicó que “el litio en la ley está reservado para el Estado y establece que no se pueden otorgar concesiones como las que se entregan en la minería del cobre”, por lo que el mecanismo “solo admite que participen privados a través de contrato”, el cual hoy en día existe para arrendar el salar a “estas dos empresas (SQM y Albemarle) con cuotas de producción”.
Entonces, lo que anunció el Presidente Gabriel Boric, agregó Marcel, es que la Estrategia Nacional del Litio “a partir de esa forma de participación del sector privado, abre una nueva alternativa de asociación con el sector público a través de sus empresas Codelco y Enami”, y así surgir con nuevas posibilidades de desarrollo.
Ante la negativa de los privados a que el Estado intervenga en la totalidad del proceso productivo, el titular de Hacienda advirtió que “ha habido una interpretación simplista, son muchas las variedades posibles de asociaciones y participación” público y privada, dependiendo de los proyectos que vayan saliendo, tales “como participación mayoritaria, cláusulas especiales, pactos de accionistas, etc.”, ejemplificó.
En tal sentido, el ministro Mario Marcel hizo especial distinción en que esta asociación público-privada no significa un control en toda la industria, ni falta de voluntad para negociar, es solo que realmente –puntualizó– “desde el punto de vista de la distribución de las rentas, la participación en una sociedad es mucho más efectiva que dejarlo todo en un contrato como los que hoy existen” para la recaudación estatal en torno a la minería del litio.
Marcel, enfatizó que los privados tendieron a pensar que “la participación mayoritaria del Estado va a ser en cualquier proyecto de la industria del litio”, cuando el Presidente Gabriel Boric planteó en su discurso que “el control lo define para el contrato en el salar de Atacama, el cual se puede ejercer de distintas maneras”, y para futuros proyectos de la industria, la participación del Estado iría dirigida, de aquí en adelante, solo “en aquellos que tengan significación estratégica”.
Y en caso de que todos esos proyectos tengan relevancia para el país, Marcel explicó que “va a haber un Comité de Ministros al amparo de Corfo que va a ir definiendo los pasos de esta política”.
Consultado sobre si la puerta está cerrada respecto a ceder en el 51% de propiedad que tiene el Estado sobre el salar de Atacama, el ministro de Hacienda aseguró que primero “tenemos que dejar que avancen las negociaciones y además tenemos que ver quién más tiene interés de llegar a Chile”, por lo que no lo descarta.
Más allá de las interpretaciones, el jefe de Teatinos 120 minimizó las preocupaciones del mercado asegurando que a través de esta nueva modalidad, “SQM podría extender su actuación en el salar de Atacama en el 2030”. Y recalcó que en todo momento será una negociación, “no hay ninguna obligación de cederle una parte al Estado, se van a respetar los contratos como están”, sostuvo.
Marcel también defendió a la empresa minera privada: “Es evidente que SQM tiene una historia compleja por sus orígenes, el tema del financiamiento de las campañas, pero SQM ha tenido una transformación importante. Hoy en día es una empresa que se ha tecnificado, es una empresa que ha invertido en la sustentabilidad de su proyecto”.
Finalmente, el titular de Hacienda recalcó que, más allá de la discusión sobre la propiedad, lo que limita a la industria es lo medioambiental, “por el tema del consumo de agua, a través del proceso de evaporación”
“Parte de la estrategia es ir generando el cambio tecnológico que permita ser más compatible medioambientalmente, incluir nuevos actores, profundizar investigación en la materia”, concluyó Marcel.