Gastronomía
McDonald’s Corp. anunció una nueva política de antibióticos en la carne que afecta el 85 por ciento de su cadena de oferta global, con el fin de reducir el uso de antibióticos importantes para la salud humana. Debido al enorme poder adquisitivo, el plan tiene el potencial de cambiar las prácticas en la industria de la carne de res en general.
Los consumidores, cada vez más preocupados por la forma en que se elaboran sus alimentos, han exigido una serie de cambios, entre los que se incluyen la carne de res y de aves sin antibióticos.
Los científicos aseguran que el uso excesivo de antibióticos en la agricultura es la causa del creciente problema mundial de resistencia a los antimicrobianos.
McDonald’s ha emprendido una misión de limpieza en su menú desde que Steve Easterbrook tomó el mando en 2015. En septiembre, aseguró que se desharía de algunos conservantes y colores falsos de sus hamburguesas.
Este año cambió a carne fresca, en lugar de congelada, para sus «Cuarto de libra» y en 2016 eliminó los conservantes artificiales de los «McNuggets de pollo».
Debido a su escala, con alrededor de 37.000 restaurantes en todo el mundo, los cambios de compra de la cadena, incluso los pequeños, pueden tener importantes repercusiones para la industria. Cuando eliminó la margarina de sus «McMuffins de huevo» puso a los proveedores a trabajar a toda marcha para hacer y enviar millones de libras de mantequilla a todo EE.UU.
El anuncio incluye tres puntos de referencia: medir el uso actual de antibióticos en sus 10 principales países proveedores de carne, establecer metas de reducción de antibióticos de importancia médica para fines de 2020 y exigir a los proveedores informar sobre los avances en el cumplimiento de estos objetivos a partir de 2022.
Los antibióticos se usan con frecuencia en la agricultura animal por dos razones principales: para prevenir la propagación de enfermedades y para promover el crecimiento.
Según datos disponibles, alrededor del 70 por ciento de los antibióticos en EE.UU. se utilizan en la agricultura animal, de acuerdo con Pew Charitable Trusts.
McDonald’s ya se había comprometido a eliminar antibióticos importantes para la salud humana de sus cadenas de suministro de pollo en 2015 y cumplió la meta en 2016, antes de lo previsto.
