Tras más de 4 años en campaña, la Fundación Vegetarianos Hoy logró ingresar a la Cámara de Diputados -de la mano de cinco senadores- un proyecto de ley que permita modificar el tratamiento jurídico que reciben los animales en el Código Civil.
Según la legislación chilena actual, los animales están catalogados como muebles, cosas que pueden transportarse de un lugar a otro por influencia de terceros o por movimiento propio. Pero a pesar de lo descrito en el Código Civil en su artículo 566, se encuentra científicamente documentada la capacidad de los animales de sentir sensaciones físicas -como placer y dolor-, además de psicológicas -como miedo y estrés-.
Es por ello que la Fundación Vegetarianos Hoy ha promovido desde el año 2015 su campaña #NoSonMuebles, que aspira a modificar el artículo del Código Civil para conseguir una nueva calificación jurídica de los animales en Chile. En estos 4 años han reunido más de 160 mil firmas de apoyo, y a finales de abril lograron ingresar una moción a la Cámara de Diputados, de la mano de los senadores Francisco Huenchumilla (DC), Juan Ignacio Latorre (RD), José Miguel Durana (UDI), Carolina Goic (DC) y Felipe Kast (Evopoli). Con este último, los organizadores de la campaña han colaborado para la redacción del proyecto.
En el documento los senadores argumentan que la legislación actual es heredera de una concepción de los tiempos romanos sobre los animales, que ha permanecido intacta desde el primer código civil escrito por el mismo Andrés Bello en 1855. «Con el paso de los siglos, y ante la irrefutable evidencia científica, los entramados legales más avanzados del planeta comenzaron a dejar atrás esta primitiva percepción del animal para ir premuniéndolos de normativas tendientes a un trato más responsable y acorde con los tiempos», argumenta el Proyecto de Ley sobre calificación jurídica de los animales, que espera seguir los pasos de legislaciones como en Reino Unido, Austria, Dinamarca o Bélgica, que han prohibido el desarrollo de la peletería.
Para Ricardo Cantero, coordinador de la campaña, resulta imperioso que “un cuerpo normativo de carácter general esté en concordancia con esas normas específicas y garantistas. Otro hito importante es estar a la par de los ordenamientos jurídicos internacionales; Francia, Alemania o Suiza ya han dado este paso”.
Como toda gestión de un proyecto de ley en el Parlamento, su aprobación o rechazo puede depender de diversos factores, pero “lo más importante, para generar esa voluntad política que necesitamos, es llamar a la ciudadanía a apoyar, ayudar y adherir nuestra causa y nuestros esfuerzos”, afirma Ricardo.