Opinión
Innovar hacia la transformación digital es el desafío más importante que enfrenta la industria inmobiliaria, de cara a los profundos cambios que ha tenido no sólo este sector económico, sino que el país desde el estallido social y que se han acentuado con la crisis por el coronavirus.
Los movimientos sociales no sólo ayudan a rediseñar la realidad, sino que bien encausados y sin violencia pueden incluso generar crecimiento o innovación en ciertas áreas de la economía. Lo mismo el advenimiento de una pandemia sin precedentes.
En este aspecto podemos apreciar el impacto que está teniendo la transformación digital en los procesos de cotizaciones y reservas del sector inmobiliario. Como en otros rubros productivos, la crisis política y social, primero; y ahora la coyuntura sanitaria, han puesto a los actores de esta industria de golpe frente al necesario salto hacia la transformación digital.
De un universo de más de 480 proyectos que maneja PlanOK en la Región Metropolitana, en el comparativo los primeros 4 meses de 2019 respecto de 2020, se observó que las cotizaciones presenciales en enero disminuyeron -6%, en febrero -4%, registrándose en marzo y abril una abrupta caída del -52% y -73% respectivamente. Por otro lado, este mismo trámite vía online a distancia tuvo un alza de 14%, 13%, 30% y 48%, respectivamente en cada mes.
Ahora no se trata de hablarlo en charlas o exposiciones como una tendencia que puede golpearnos la puerta, sino que como un escenario que ya está instalado, debido a que la realidad de los consumidores y de los colaboradores cambió. La pregunta que debemos hacernos es ¿estamos preparados para este desafío?
La digitalización tomada más como un proceso que como un objetivo, necesita de actitudes dispuestas al cambio y a la adaptación constante que implica salir de una zona de confort para buscar nuevas oportunidades.
El liderazgo, la información oportuna y de negocios son elementos clave para identificar espacios de mejora y encontrar, a través de la tecnología, soluciones para las inmobiliarias, sus prospectos y clientes. El mercado inmobiliario, tiene hoy una oportunidad valiosa de dar el salto definitivo para adoptar más y mejor tecnología. Estamos justo en el momento indicado para instalar nuevas prácticas que preparen a las empresas para la nueva normalidad.
