Pese a las diversas inversiones que se están desarrollando en el tema, hay todavía razones que dificultan esta transición en el país, pese a la importancia de fomentar este tipo de tecnologías en miras a la disminución de los contaminantes que contribuyen al calentamiento global.
El 2035 es un año clave en el uso de combustibles limpios para la producción de vehículos, ya que desde esa fecha la Comisión Europea prohibirá la fabricación de automóviles que utilizan carburantes fósiles en ese continente, debido a que son una de las grandes fuentes de emisión de gases de efecto invernadero en el mundo.
“El transporte es el talón de Aquiles para que hoy se reduzca el consumo excesivo de combustibles fósiles”, aseguró Carlos Restrepo, director del Magíster en Ciencias de la Ingeniería con mención en Conversión de Energía de la Universidad de Talca.
La Unión Europea, junto a potencias como Estados Unidos y China, son responsables del 46% de las emisiones de gases de efecto invernadero. Según el académico, cada país que ha firmado el Tratado de Paris debe hacer su parte por disminuir la emisión de estos gases “de acuerdo a la realidad y a las posibilidades que tengan”.
A nivel nacional, existe una hoja de ruta trazada para disminuir la emisión de gases de efecto invernadero y llegar a ser carbono neutral al 2050. Sin embargo, el experto aseguró que la medida adoptada por la Unión Europea no podría ser replicada en Chile, ya que hoy “la industria automotriz aun no ofrece precios competitivos”, lo que podría cambiar en el futuro cuando se masifique la producción de vehículos con tecnologías limpias.
“Por ahora no estamos preparados para una incursión masiva de vehículos eléctricos”, expresó Restrepo, quien agregó que “lo importante es ir creando infraestructura e incentivos para que esa tecnología se vaya posicionando a mediano plazo en el país», afirmó.
A pesar de que los vehículos eléctricos son una alternativa menos contaminante de traslado, el ingeniero detalló que presentan inconvenientes, principalmente asociados a “los tiempos de carga, la infraestructura que se requiere para ello y la energía que utilizan para este proceso”.
“El futuro de la electromovilidad estará gobernada por el vehículo de hidrógeno”, recalcó el especialista, quien valoró los avances que han comenzado a observarse en el país. “Chile ya cuenta con un proyecto para posicionarse como un líder mundial en la producción de hidrógeno verde que será generado a partir de las energías renovables. Este será el combustible del futuro”, concluyó.