La aerolínea, una de las más importantes de México, dejó de operar el pasado 28 de agosto, junto con sus dos filiales, Click y Link, de manera «indefinida» debido a la severa crisis que enfrenta.
La aerolínea Mexicana de Aviación despedirá a la mitad de sus trabajadores y reducirá sus rutas y su flota en un 70% para reanudar sus operaciones en diciembre próximo, informaron este lunes autoridades y dirigentes sindicales aéreos.
Fuentes sindicales cercanas al proceso explicaron a Efe que esto significa la liquidación de 3.900 trabajadores que representan cerca del 50% del total de los empleos directos que generaba la empresa.
El secretario del sindicato Nacional de Trabajadores de Transportes, Transformación, Aviación, Servicios y Similares (SNTTTASS), Miguel Ángel Yúdico, dijo que se analiza recortar 1.500 empleados de tierra, 900 azafatas y 600 pilotos.
Según portavoces sindicales, Mexicana operará con 30 aeronaves en 23 rutas, de ellas 6 nacionales y 17 internacionales, en particular entre México, EE.UU. y Canadá.
Por su parte, el ministro de Trabajo de México, Javier Lozano, reconoció que no será fácil para la compañía pero «hay voluntad tanto de empresarios, como de los sindicatos de pilotos, sobrecargos y de tierra», para su regreso.
En el marco de la participación en el foro «Por un mercado laboral más eficiente», Lozano explicó que el plan de negocios de Mexicana implica una reducción «sustancial del número de aeronaves y rutas, así como de frecuencias de vuelo», así como un nuevo modelo de trabajo.
Ello, provocará «una sensible pérdida de fuentes de trabajo» y «se habla de que la empresa operaría sólo con 30 aviones y no con 110», añadió Lozano.
«Están alineados los incentivos, los inversionistas, acreedores y sindicatos y espero también que los consumidores estén presentes para poder atender los adeudos con ellos y dar un servicio competitivo», dijo el ministro a la prensa.
El plan pretende liquidar a los empleados y hacer un nuevo contrato colectivo de trabajo que será vigilado por el Gobierno para garantizar que las condiciones de trabajo cumplan con la ley, así como en las liquidaciones.
Mexicana de Aviación, una de las principales aerolíneas del país, dejó de operar desde el pasado 28 de agosto, junto con sus dos filiales, Click y Link, de manera «indefinida» debido a la severa crisis que enfrenta.
Antes de vender la aerolínea, el Grupo Posadas solicitó en México y EE.UU. un concurso mercantil que le permitiera reestructurar sus deudas con acreedores en ambos países.
El pasado 7 de septiembre, un juez mexicano declaró a la aerolínea en concurso mercantil, que es un proceso judicial de suspensión de pagos de la deuda y deja en manos de un administrador encargado de ver la viabilidad de la empresa, antes de que se declare en quiebra.
El administrador de la firma, Javier Christlieb Morales, y los actuales dueños y los empleados estudian estrategias para superar la crisis para sacar a flote a la compañía.
Mexicana de Aviación tiene deudas por unos 11.000 millones de pesos (alrededor de 846 millones de dólares) y requiere de una capitalización de entre 100 y 150 millones de dólares para salir a flote, según el Grupo Posadas.
En tanto, la Cámara de Diputados nombró una comisión para dar seguimiento al proceso de venta y reestructura de Compañía Mexicana de Aviación (CMA) e investigará las causas que llevaron a la quiebra técnica de la línea aérea, por una supuesta «administración fraudulenta» en la gestión del empresario Gastón Azcárraga.
