La advertencia la hicieron los tres por separado en el mismo día. Dicen que no es necesariamente una mala noticia pero que requerirá ajustes. La OCDE recomienda que el gobierno gaste menos.
Credit Suisse y Santander son dos de los bancos más influyentes del mundo. José de Gregorio es uno de los economistas más respetados de Chile, ex ministro de los gobiernos de la Concertación y presidente del Banco Central hasta hace un poco más de un año.
Los tres por separado han llegado a la misma conclusión: el ciclo expansivo de la economía chilena terminó.
El primero en elevar la alerta en la mañana fue Pablo Correa, gerente de la división de estudios y políticas públicas del Banco Santander. Dijo que el “supreciclo” del empleo y el consumo están llegando a su fin. “Es un hecho que Chile terminó su ciclo expansivo y que estamos entrando a un ciclo neutro, pero no hablaríamos de un período recesivo”, señaló Correa.
El informe del banco destaca que “ha comenzado a desaparecer la opinión de un sobrecalentamiento de la economía chilena” y agrega que “el país está próximo a entrar a una fase de relativa moderación en la expansión del producto”.
A la advertencia del Santander le siguió la de Credit Suisse. Giles Keating, vicepresidente del Comité de Inversión del banco suizo y responsable del área de Análisis a nivel global de la Banca Privada, dijo que está claro que Chile y las otras economías de la región que se han beneficiado del boom de los commodities se van a tener que ajustar.
En Chile para dar una charla a los clientes del banco, Keating dijo que no será un colapso de la economía, pero si habrá que adaptarse ya que en su opinión el “largo superciclo de los commodities está llegando a su fin”. Explica que la desaceleración china tendrá un fuerte impacto en la demanda y los precios de las materias primas, el cobre en particular.
El último en sonar la alarma fue el ex presidente del Banco Central, José de Gregorio. En una presentación en el Club de la Unión, de Gregorio dijo que
la economía está llegando al final de un ciclo muy expansivo y que ahora está volviendo a crecer a su potencial, “se está normalizando”.
El Santander, Credit Suisse y de Gregorio concuerdan que el fin del boom de la economía chilena no es algo de preocuparse. Correa considera que este cambio como “algo sano, relacionado al fin de un proceso de rápida acumulación de capital y de ajuste de las expectativas de los agentes”.
Una de las sugerencias de la OCDE es que el gobierno gaste menos. En un informe publicado ayer reconoce “el buen desempeño económico de Chile”, pero dice que la consolidación fiscal debe ser “más ambiciosa”.
Para de Gregorio es una positivo que la economía se enfríe: “Es una buena noticia que crezcamos a niveles coherentes con nuestro potencial. Si seguíamos al otro ritmo de crecer por sobre 5% por los próximos cinco años se crearían problemas, porque no tenemos la capacidad productiva”.
“Chile tiene un marco de políticas públicas que le permite navegar… mitigar el impacto de una crisis”, agregando que no hay que sobre reaccionar acerca del impacto de una caída del precio del cobre.
En su opinión tendremos que acostumbrarnos a un precio del cobre más débil con menor crecimiento. Estima que el crecimiento será entre 4% y 5% y no entre 5% y 6% como en los últimos años, cuando la economía ha sido vigorosa.
Rescató el vigor del crecimiento del empleo y las remuneraciones y dijo que la productividad ha mejorada mucho más de lo que muestran las cifras.
También hizo una velada crítica al exitismo del actual gobierno. “Chile lo que ha tenido en estos años es una recuperación de la crisis de la que venía. Previo la crisis del 2008 la economía creció en promedio 6% y desde que salimos de la crisis el promedio es cerca de 5,6%, por lo que no hay nada extraordinario en lo últimos tres años en términos de crecimiento. Ese es el potencial de nuestra economía”.
Explicó que los factores detrás del ciclo expansivo son una política fiscal y monetaria expansiva. “La Tasa de Política Monetaria es menor que la que teníamos durante la crisis asiática y esto no es normal”, explico. El ex presidente del BC dijo que “a eso hay que agregarle términos de intercambio (cobre) a récord histórico”, una inflación baja y un aumento de la productividad.
Dijo que el déficit de cuenta corriente no es un problema ya que “tener un tipo de cambio flexible” lo contiene. El mayor riesgo es lo que pase en China, pero lo relativizó: “hemos crecido con precio del cobre a un dólar y hemos crecido con cobre en máximos históricos”.
Por su parte Correa, del Santander dijo que “el mercado deba estar atento a ciertos riesgos; en particular, dado que los socios comerciales de Chile todavía no consolidan su recuperación”, y explicó que “los riesgos de un menor crecimiento externo estarían determinando un menor dinamismo en el comercio exterior, eje de nuestra economía”.
Su proyección es que la economía crecerá 4,7% este año y 4,2% el próximo.
El Santander ve una caída en el ritmo de crecimiento de la inversión, un enfriamiento en la construcción y una moderación en el consumo. “El superciclo de empleo y de la superinversión llegaron a su fin y los equilibrios que veremos de ahora en adelante son distintos”, dijo el jefe de estudios del banco. Agregó que la caída en las expectativas empresariales se irán transpansando a la economía real en los próximos meses y eso se traducirá en menos inversión en algunas industrias. Dijo que el desempleo subirá a 7% el próximo año.