Para poder hacerlo, el Congreso debe antes derogar las leyes Cerrojo y de Pago Soberano: la primera impide volver a negociar con los acreedores y mejorar la oferta realizada a los bonistas en los canjes de deuda de 2005 y 2010, mientras que la segunda desplazó de Nueva York a Buenos Aires la sede de pago.
El senador argentino del Frente para la Victoria (FpV) Juan Manuel Abal Medina afirmó hoy que el kirchnerismo dará quórum en la Cámara alta del Congreso para tratar el proyecto con el que el Gobierno prevé saldar deuda en cese de pagos desde 2001 con acreedores en Nueva York.
«Tenemos que ver el proyecto, analizarlo, escuchar a los especialistas, convocar a los expertos y tomar la mejor decisión para Argentina», dijo Abal Medina en declaraciones a radio Mitre.
Quien fuera jefe de Gabinete de la ex-presidenta Cristina Fernández entre 2011 y 2013 también aconsejó a Héctor Recalde, titular del bloque kirchnerista en la Cámara de Diputados, que habilite el debate para derogar las leyes vigentes que impiden el pago de la deuda y tratar el nuevo proyecto.
«Que vaya, que discuta, que defina, que podamos ver bien la propuesta», pidió el senador opositor.
Abal Medina también aseguró que «lo que más le preocupa» es «la posibilidad de que el 93 % que ya cerró pueda reabrirse», en referencia a los acreedores del cese de pagos de 2001 que aceptaron las reestructuraciones argentinas de 2005 y 2010.
Argentina mantuvo un largo conflicto con los acreedores restantes durante los últimos 15 años hasta que, a fines de febrero, alcanzó un principio de acuerdo con fondos que representan el 85 % de los reclamos incluidos en un fallo del juez neoyorquino Thomas Griesa contra el país suramericano.
Asimismo, Argentina deberá pagar en efectivo a estos acreedores antes del 14 de abril, dinero que el país planea conseguir mediante una emisión internacional de bonos por 11.684 millones de dólares.
Para poder hacerlo, el Congreso debe antes derogar las leyes Cerrojo y de Pago Soberano: la primera impide volver a negociar con los acreedores y mejorar la oferta realizada a los bonistas en los canjes de deuda de 2005 y 2010, mientras que la segunda desplazó de Nueva York a Buenos Aires la sede de pago.