A tres días de la votación, hay un renovado optimismo ante las últimas encuestas que revelan la opción del “Brexit” perdiendo fuerzas. El Fondo Monetario volvió a advertir sobre las catastróficas consecuencias si el Reino Unido deja la Unión Europea e informó que puede tener un impacto de más de un 5 por ciento en el tamaño de la economía británica al 2019, respecto a si se mantuviera en el bloque de 28 países. El Primer Ministro británico, David Cameron, dijo que el Reino Unido “es mejor dentro de la UE”.
A tres días del histórico referendo que decidirá el futuro de Gran Bretaña en Europa, hay un renovado optimismo ante las últimas encuestas que revelan la opción del “Brexit” perdiendo fuerzas.
El voto del próximo jueves tiene a inversionistas alrededor del mundo en vilo y este fin de semana el Fondo Monetario volvió a advertir sobre las catastróficas consecuencias si el Reino Unido deja la Unión Europea e informó que puede tener un impacto de más de un 5 por ciento en el tamaño de la economía británica al 2019, respecto a si se mantuviera en el bloque de 28 países.
El FMI, que había advertido anteriormente que la economía británica y mundial serían golpeadas si Reino Unido abandona la UE, entregó el sábado un análisis detallado de cómo la decisión afectaría a la quinta economía mundial.
Si Reino Unido logra pactar una relación similar a la de Noruega con la UE, su producción económica al 2019 probablemente será cerca de un 1,5 por ciento inferior a que si permanece como miembro pleno, según el escenario de un impacto «limitado» del FMI.
Noruega no es miembro de la UE, pero tiene acceso a su mercado único a cambio de aportar dinero al bloque y aceptar su principio de libertad de movimiento, así como algunas de sus normas y reglamentos.
Bajo el escenario «adverso» del FMI, de negociaciones largas e infructuosas entre Londres y Bruselas, que llevarían a que Reino Unido tenga que regir su intercambio con la UE por las normas de la Organización Mundial de Comercio, la economía crecería un 5,5 por ciento menos al 2019.
«En el corto plazo, la incertidumbre generada por tener que navegar un proceso de salida complicado y no sometido a ensayo podría ser dañina para la inversión, el consumo y el empleo (en Reino Unido)», señaló el FMI en su reporte.
Durante el fin de semana un influyente miembro del Consejo del Banco Central Europeo reveló que los principales bancos centrales del mundo están dispuestos a intervenir si el Reino Unido vota por dejar la Unión Europea.
«Un voto británico a favor de dejar la Unión Europea es el riesgo que más nos preocupa en estos momentos», apuntó Ignazio Visco en una entrevista a varios diarios, incluyendo el italiano La Repubblica.
«Mantenemos la atención sobre este riesgo a diario y todos los bancos centrales, no solo en el BCE, estamos listos para intervenir con los instrumentos convencionales de los que disponemos: tipos de interés, repos, swaps», afirmó el también gobernador del Banco Central de Italia.
Funcionarios habían dicho a Reuters la semana pasada que el BCE se comprometería a respaldar a los mercados de acuerdo con el Banco Central de Inglaterra, si el voto en el referéndo es de abandonar el bloque.
Visco añadió que el largo proceso de negociación ante un eventual «Brexit» tendría consecuencias financieras de forma incuestionable, aunque era difícil predecir su magnitud.
Los dos bandos del referendo europeo retomaron ayer los actos de la campaña tras una pausa de tres días por el asesinato de la diputada Jo Cox, intensificando sus mensajes a favor y en contra de la Unión Europea en una acalorada recta final.
Los políticos han recurrido a los dominicales nacionales para transmitir la relevancia de acudir a las urnas el próximo jueves, donde los votantes afrontan una decisión «existencial», según advirtió el Primer Ministro, David Cameron, al Daily Telegraph.
Favorable a que este país no rompa relaciones con Bruselas, el Primer Ministro ha indicado que los británicos optarán por un escenario para el que no habrá «vuelta atrás», insistiendo en que la consulta será «irreversible».
Abogar por el «Brexit» –salida del bloque común– será «un gran error», según su argumento, que derivará en una «incertidumbre» que durará una década.
Cameron ha apuntado además a que un voto por la permanencia representa todo por lo que luchó la diputada laborista proeuropea Jo Cox, asesinada a tiros el jueves en Birstall (al norte del país) por un hombre con supuestos vínculos neonazis y problema mentales.
La trágica muerte de la parlamentaria, de 41 años, ha sumido en shock a dicho país y ha puesto en entredicho el tono crispado de los argumentos empleados en el debate sobre Europa, en particular al tratar los dos puntos más espinosos: inmigración y economía.
Un sondeo divulgado hoy por la firma The Survation para The Mail On Sunday, realizado tras el asesinato de la política laborista, atribuye una ventaja de tres puntos a los partidarios de la continuidad, con un 45 % del apoyo frente a un 42 %.
Según el líder tory, Cox representaba «lo mejor» de un país «decente y apasionado».
«¿Vamos a escoger la opción de Nigel Farage –por el líder del eurófobo UKIP–, que hace que el Reino Unido retroceda, nos divida en lugar de unirnos (…) o, en lugar de eso, escogeremos el Reino Unido tolerante y liberal?», se preguntó el dirigente conservador.
En esa línea ha ido también el mensaje enviado por Osborne desde el tabloide Mail On Sunday, al que dijo que confía en que lo que resta del debate pueda llevarse a cabo «en un tono menos divisorio».
«Tengamos menos retóricas incendiarias y discursos sin base, y más hechos y argumentos razonados», pidió el ministro, que en otra entrevista concedida hoy al canal ITV alertó de que el «Brexit» convertiría al Reino Unido en un país «mucho más pobre».
También el líder laborista, Jeremy Corbyn, muy criticado durante la campaña por no haberse implicado más a favor de la Unión, defendió en una entrevista con la BBC la opción de la permanencia.
«Si abandonamos (la UE), tendremos exactamente los mismos problemas sobre vivienda, empleo, seguridad social… pero nos resultarán muchísimo más difíciles», señaló Corbyn.
En contraste con esos argumentos, el titular de Justicia, Michael Gove –abanderado del «Brexit»– compareció hoy en esa misma cadena de televisión, donde destacó que un voto por la salida supone «una afirmación de fe y esperanza» en este país.
Gove consideró que ambas opciones «conllevan riesgos de cara al futuro y existen desafíos en la economía global», pero –según él– los retos serán más fáciles de abordar y menores si el resultado de la consulta apuesta por dejar la UE, pues se recuperaría el control sobre la economía y la legislación.
A cuatro días, el ex alcalde de Londres, Boris Johnson –líder oficioso de la campaña del «Brexit»– se dirigió a los votantes en un mitin celebrado en Londres para defender la salida.
El mediático político también recurrió a la prensa, en este caso al Sun On Sunday, para subrayar que el referendo es una «oportunidad única en la vida» y pedir a los votantes que no «teman» respaldar la salida.
A su juicio, la pérdida de autonomía que conlleva la UE ha impedido a los políticos cumplir sus promesas en materia de inmigración.