Las actividades de prospección petrolífera están volviendo a ganar fuerza ya que las mejoras en productividad y la reducción de costes ayudan a obtener beneficios a precios más bajos, según Goldman Sachs Group Inc.
Los productores de petróleo estadounidenses tienen intención de aumentar su actividad perforadora en una horquilla de entre US$50 y US$55 por barril, mientras se adaptan a un petróleo más barato, tal y como preveía la tesis del banco “El nuevo orden del petróleo”, han declarado analistas entre los que figura Peter Hackworth en un informe enviado por correo electrónico y que data del 11 de octubre. El umbral para aumentar la actividad ha bajado de la horquilla entre US$60 y US$65 por barril de hace un año, ha comentado el banco.
“La industria ya se ha adaptado a los bajos precios y la actividad está creciendo”, recogen los analistas en el informe. “Es probable que las tasas de agotamiento sean más bajas que las de los años previos, ya que la industria se centra en operaciones más eficientes”.
Los precios del petróleo se han reducido a menos de la mitad desde 2014, cuando la Organización de Países Exportadores de Petróleo adoptó una política de extracción sin límites para tratar de acaparar la producción de mayor coste del mercado, incluyendo parte de la producción de shale de EEUU.
Según “El nuevo orden del petróleo” de Goldman, las alternaciones en el mercado ocasionadas por la revolución de los esquistos en EEUU podría forzar a la industria a adaptarse a bajos precios del petróleo, volviéndose más eficiente en sus costes y rebajando la inflación causada por los límites a la producción.
Los futuros del petróleo en Nueva York han subido 19 centavos, hasta US$50,98 el barril a las10:08 a.m., hora local de Londres. Los precios cerraron a un 1,1 por ciento más bajo el martes, con una bajada de su punto más alto desde julio de 2015.
“El foco del mercado puede encontrarse ahora en la capacidad de la OPEP para ayudar al reequilibrio, pero consideramos que la reacción más importante del mercado ya ha tenido lugar” ha comentado Goldman.
En un anuncio imprevisto el mes pasado, la OPEP reveló que el grupo de 14 países había alcanzado un acuerdo para limitar la producción entre 32,5 millones y 33 millones al día. La decisión fue percibida por muchos, como Katherine Richard, jefa ejecutiva de Warwick EnergyGroup, como una “capitulación” ante los perforadores de las cuencas de esquistos estadounidenses.
El número de torres perforadoras activas en EEUU subió a 428 la semana pasada, desde el punto más bajo en seis años de 316 en mayo, según Baker Hughes Inc. Se añadirán 300 perforadoras más hasta finales del próximo año, ha declarado Goldman en su informe.