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Larraín a Valdés: «Usted le puso empeño, no fue suficiente» El actual secretario de Estado no se guardó nada, en seminario donde compartió con el ex ministro

Larraín a Valdés: «Usted le puso empeño, no fue suficiente»

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Natalia Saavedra Morales
Por : Natalia Saavedra Morales Editora periodística El Mostrador Mercados
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En el encuentro anual de Compass Group el fuego lo abrió Larraín. Dijo que el anterior gobierno no podía echarle la culpa a la desaceleración externa para explicar el bajo crecimiento. Solo parte de un discurso duro. Valdés, que exponía en el panel siguiente le contestó: «No quiero seguir en esta discusión un poco latera».


El salón estaba lleno. En pleno corazón de Sanhattan, en el hotel W, ejecutivos del mercado financiero chileno se reunieron esta mañana en el seminario de Compass Group. El encuentro partía con una promesa de dar que hablar, al menos porque en él se reunirían dos ex ministros de Hacienda, Rodrigo Valdés y Andrés Velasco, el actual secretario de esa cartera, Felipe Larraín y el ex presidente del Banco Central, Rodrigo Vergara.

Pero más allá del análisis de la marcha de la economía que el grupo entregó, la jornada estuvo marcada por la presentación del actual mandamás de Hacienda, Felipe Larraín. El ministro dedicó gran parte de su exposición a decirle a Valdés que los esfuerzos del Ministerio de Hacienda no habían sido suficientes y que había que dejar de «echarle la culpa» a la desaceleración externa como razón del bajo crecimiento del país. «Chile debería haber empezado a crecer al año pasado», aseguró.

Dijo en esa línea que dos tercios de la baja en el avance de la economía local se explicaban por razones internas y solo un tercio por la ralentización mundial. Larraín dijo que la confianza empresarial había caído los cuatro años de gobierno, así como la productividad, no sólo del sector minero. La Reforma Tributaria, añadió, fue en contra de todas las tendencias mundiales.

Larraín agregó que este no era un tema de opinología, sino que las finanzas públicas tuvieron deterioros en aspectos claves que le impiden a la actual repartición comprometerse a lograr un crecimiento superior al 3,5% a 4% que han estimado.

«Estos son datos no opiniones. Hemos tenido un deterioro importante en el balance de efectivo, en el equilibrio fiscal. Pasamos de superávit de 0,2 en el periodo de 2010 a 2013, a un promedio de -2,3 y una estimación de -2,8 para el año anterior, según las últimas cifras de Dipres», detalló.

Tras ello el secretario de Estado dijo que era necesario detallar que explicaba ese deterioro. Rodrigo Valdés lo observaba de la tribuna.  «De nuevo la tentación es echarle la culpa a la economía mundial y decir que el problema es el precio del cobre», dijo entonces Larraín agregando que «gran parte del problema de deterioro de efectivo tiene que ver con el gasto público, particularmente en el período 2014, 2015 y reconozco los efectos no porque este aquí a Rodrigo (Valdés), usted le puso empeño. no fue suficiente, pero le puso empeño», dijo en un minuto de espontaneidad que sacó pocas risas.

El ministro de Hacienda terminó la primera parte de su presentación, donde realizó el diagnóstico, señalando que los factores que explicaban el deterioro de la economía eran tres: el precio del cobre, la «tremenda expansión del gasto», y en tercer lugar, el frenazo económico.

Profundizando la tesis dijo que había que ponerse cara a cara con el deterioro del balance estructural. «Hay un deterioro sostenido del balance estructural que quedó en 0,5 a fines del 2013 y que se deterioró, creíamos que -1,7  (…) y que significa esto de que dicen que esto fue un error, de pasar de 1,7 al 2,1, hay un error está reconocido, no calificó los errores, pero les digo lo que significa una posición fiscal más debilitada en US$ 1.100 millones en el primer año», aseguró. No se quedó en eso y profundizó en el punto señalando que «este no es un error insignificante, menor técnico. osea es un error técnico, pero tiene consecuencias. No da lo mismo partir de -1,7 que en -2,1. Partimos de una posición fiscal deteriorada», precisó en relación al ajuste de las cifras del déficit fiscal.

Al terminar la presentación Larraín dijo que le «encantaría» quedarse a debatir, pero se excusó por temas de agenda.

No nos estamos entendiendo 

A diferencia de otros foros, tras la salida de Larraín la audiencia se mantuvo casi inamovible a la espera del panel que integraban Andrés Velasco, Rodrigo Vergara y el aludido en gran parte del discurso, Rodrigo Valdés, quien fue el primero en intervenir, quien puso los puntos sobre la mesa, eso, aunque su contendor ya no podía escucharlo.

«Dado que el ministro Larraín habló bastantes cosas del pasado creo que Felipe tiene una pega difícil, pero creo que las discusiones hay que enmarcarlas en un escenario lo más preciso posible. Y para hablar de esta latera discusión si la desaceleración fue externa o interna y esto es noticia, pero si puedo simplificar las cosas Larraín piensa que dos tercios de la desaceleración del gobierno de la presidenta Bachelet tiene que ver con factores externos y yo creo que dos tercios son estímulos»

Valdés no ahondó en detalles de lo imputado por Larraín a la salud fiscal, pero dijo que no le interesaba «seguir en esta discusión un poco latera», pero que si entonces la macroeconomía no importaba a la hora de hacer análisis entonces ante cualquier cosa no se escucharan esos datos. Dijo que sí el cobre explicaba el pasado, y que efectivamente se había elevado el gasto, que sabía que las cifras fiscales estuvieran erradas, pero que también era «inadmisible que una autoridad diga que eso es mentira», en relación a los dichos del ministro de Economía, José Ramón Valente.

«En palabras muy corrientes la plata está en Codelco. Cuando Codelco deje de usar los mecanismos que tiene para no pasarle la plata al Fisco, el balance va a cambiar», aseguró..

El remate lo hizo señalando que se requería seriedad en el debate y finiquitó señalando que el ministro Larraín se equivocaba y que «la seriedad de este debate requiere saber que es verdad y que no es verdad (…). ¿Cuál va ser la regla fiscal de este gobierno? Esta idea de decir que en seis o ocho años más vamos a llegar a algo, que de verdad no aprieta a nadie».

Para calmar los ánimos, el ex presidente del Banco Central, Rodrigo Vergara inició su intervención señalando que el debate de las razones de la desaceleración mejor «se las dejamos a los estudios posteriores, a los historiadores», poniendo el foco el el debate práctico.

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