Un balde de agua fría. En eso se traduce la noticia que el Banco Central dio a conocer esta mañana, al corroborar que el Imacec anotó un 2,3%, el menor registro de todo 2018 y considerablemente inferior al de agosto pasado.
El gobierno de Sebastián Piñera ya no recibe como un salvavidas las cifras del Imacec, sino más bien como una tremenda preocupación. Esto, porque septiembre fue el mes de menor crecimiento económico en lo que va del año, confirmando así las señales de desaceleración de la actividad.
El Banco Central, como cada mes, fue el encargado de dar la noticia esta mañana. Lo que se temía. La economía chilena, medida con el Imacec, experimentó una variación de apenas 2,3% en el noveno mes del año, cifra no se veía desde septiembre de 2017.
Números preocupantes que escaparon por poco del pronóstico de los expertos, que eran más pesimistas y apuntaban sólo a un 2%, número considerablemente inferior al 3,2% augurado en agosto pasado.
La economía chilena va en picada y cerró el tercer trimestre con una variación de apenas 2,9%, muy por debajo del 5,3% del periodo enero-marzo y del 4,3% del segundo trimestre.
Eso sí, según el ente emisor, se debe considerar el largo fin de semana del 18, que pesó en el bajo crecimiento ya que hubo dos día hábiles menos que en el mismo mes pero de 2017. Y pese a que el dato revela una clara desaceleración, en términos desestacionalizados, el Imacec aumentó 0,4% respecto del mes precedente y creció 2,7% en doce meses.
Entrando en detalles, el Imacec minero disminuyó 2,0%, mientras que el no minero aumentó en 2,5%. «Este último se vio favorecido por el desempeño de los servicios, efecto que fue en parte compensado por la caída de la industria manufacturera», señaló el Banco Central en un comunicado.
En términos desestacionalizados, y con respecto al mes anterior, el Imacec minero creció 1,9% y el no minero aumentó 0,3%.
Con el dato de septiembre, la actividad económica del país promedia una expansión de 4,2% en lo que va del año, cifra que está más cerca del piso del pronóstico de entre 4% y 4,5% del Informe de Política Monetaria del propio Banco Central. Dicho dato será confirmado el próximo 19 de noviembre, cuando el organismo autónomo publique las Cuentas Nacionales correspondientes al período.