De acuerdo con lo explicado por La Moneda, el Ingreso Familiar de Emergencia beneficiará a “los hogares mayoritariamente informales más afectados por el COVID19, es decir aquellos que no posean ingresos formales, contrato formal en una empresa o institución, y tampoco beneficiará a trabajadores a honorarios (que boletean) ya que ellos pueden acogerse a otras medidas» [ACTUALIZADA]
Una semana después de ser anunciado como proyecto, el Gobierno informó que recién este lunes ingresó al Congreso con discusión inmediata el Ingreso Familiar de Emergencia, iniciativa que forma parte del conjunto de medidas por el impacto del COVID-19.
De acuerdo con lo explicado por La Moneda, el Ingreso Familiar de Emergencia beneficiará a “los hogares mayoritariamente informales más afectados por el COVID19, es decir aquellos que no posean ingresos formales, contrato formal en una empresa o institución, y tampoco beneficiará a trabajadores a honorarios (que boletean) ya que ellos pueden acogerse a otras medidas que se están impulsando para proteger los ingresos en medio de la pandemia”.
Además de beneficiar a los hogares sin ingresos formales, el Gobierno indicó que por tres meses “también beneficiará a los hogares mayoritariamente informales pero que registran algún ingreso formal bajo. En este caso también se trata de familias que viven en una situación de alta vulnerabilidad durante la emergencia, pero que además de sus ingresos informales reciben, por ejemplo, una pensión baja o una boleta de bajo monto”. Se trata de un aporte directo al bolsillo de los hogares y no sufrirá ningún descuento, indicaron desde el ministerio de Desarrollo Social.
Pese al entusiasmo de Gobierno, una dura crítica lanzó el vicepresidente del Senado, Rabindranath Quinteros, al proyecto.
Quinteros informó que “ayer tuvimos una reunión como bancada con el ministro Sichel y le dije que el Gobierno había creado mucha expectativa con este proyecto y que dejaría mucha gente afuera y eso va a generar niveles de insatisfacción muy altos”.
En ese contexto, hizo ver que “hace semanas que venimos señalando que la pesca artesanal requiere asistencia, y hoy se informa de un bono de 125 mil pesos por una sola vez para los pescadores artesanales que estén en el 40% más vulnerable, lo que parece una burla y eso va generar nuevas movilizaciones”.
En esa línea recordó que el Partido Socialista (PS) presentó al Ejecutivo una propuesta para establecer un ingreso familiar digno por el periodo que dure la pandemia, “pero el Gobierno ha insistido en el camino de los bonos, que son insuficientes para aminorar los daños económicos de esta crisis”.
Según ha señalado el ministro Sichel, el monto “dependerá del tamaño del hogar y de la situación socioeconómica de la familia, disminuyendo el aporte entregado a medida que disminuya la vulnerabilidad de los hogares. Para los hogares parcialmente informales sólo serán beneficiarios los que pertenezcan al tramo de mayor vulnerabilidad (0-40%)”,
La subsecretaria de Evaluación Social, Alejandra Candia, añadió que se trata de un beneficio que se prolongará “por tres meses, siempre que los hogares cumplan con los requisitos cada uno de esos meses. El primer mes los hogares recibirán el 100% del monto que les corresponde según el tamaño de su hogar y nivel de vulnerabilidad, el segundo recibirá el 85% y el tercer mes el 70%”.
En ese sentido, el ministro Sichel sostiene que la idea es “ir disminuyendo el aporte a medida que se normaliza la actividad económica y los hogares vayan aumentando la generación de sus propios ingresos e ir transitando a otro tipo de apoyos como podrían ser subsidios al empleo”.
A modo de ejemplo, el bono alcanzará los $260.000 para una familia de 4 personas que no tenga ingresos formales e integre un hogar perteneciente al 40% más vulnerable de Chile durante la emergencia.
Se espera que desde mañana el proyecto sea analizado por las comisiones de Desarrollo Social y Hacienda.